Afi se alía con La Bolsa Social y lanza un fondo de capital riesgo que invierte en empresas de impacto social

Pablo_Man_ueco__David_Cano__Jose_Moncada
-

Afi Inversiones Globales nació el pasado mes de mayo con la vocación de seguir ofreciendo un servicio de gestión y asesoramiento a sus clientes institucionales, cuenta David Cano, socio de Afi y director general de Afi Inversiones Globales. Y en este marco, se han aliado con la Bolsa Social para lanzar un fondo de capital riesgo que prevén sea el primero de varios siempre fieles a su filosofía: “Nuestra intención no es lanzar fondos para el cliente minorista, sino para nuestros clientes institucionales”, asegura.

Bolsa Social Impacto, que es como se denomina este producto, se ha registrado en la CNMV como un Fondo de Emprendimiento Social Europeo (FESE). Responde a la inversión de impacto social: “Cada vez hay más inversores que apuestan por dar un sentido social a sus inversiones. Está muy extendido en otros países y en España está comenzando”, explica José Moncada, fundador de La Bolsa Social y director del fondo, cuya gestora será Afi Inversiones Globales.

Así, el fondo invertirá en empresas que tengan el propósito de producir un impacto positivo en la sociedad y el medioambiente, ligado a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODSs) de la ONU, habiéndose definido como prioritarios los siguientes sectores: salud y bienestar, educación inclusiva y de calidad, producción y consumo responsable, acción por el clima y medioambiente e integración y desarrollo social.

Tiene un tamaño objetivo de 25 millones de euros, de los que ya tiene 10 millones comprometidos. Y el plazo de inversión serán diez años, cinco años de inversión y cinco años de desinversión. Por su parte, fijan el objetivo de rentabilidad en torno al 6%. El capital se invertirá en dos tipos de compañías: “El 80% estará en 10-12 empresas de crecimiento, que ya tengan una valoración en el mercado, con ebitda positivo y podamos invertir entre 0,5 y 2 millones de euros; y el 20% restante en otras 10-12 empresas que denominamos semilla, que están en fases muy tempranas de innovación que a veces no prosperan porque no tienen el apoyo de inversores”, añade Moncada.

Fundamentalmente serán compañías españolas, aunque también puede haber alguna idea portuguesa. Pero tendrán que cumplir una serie de requisitos: “Siempre vamos a exigir buen modelo de negocio, equipo potente, potencial de crecimiento, misión de impacto clara y medible, facturación (que tengan ventas) y que estén cerca o ya estén en ebitda positivo”, arguye el experto. No en vano, en las empresas semilla habrá una menor exigencia.

Muchas de estas ideas saldrán de la plataforma de La Bolsa Social, aunque no todos los proyectos vendrán de aquí sino que se hará un análisis fuera de ella.

El producto, que está dirigido a inversores institucionales, ya tiene compromisos de inversores en torno a los 10 millones de euros, que provienen de mutualidades, family office, fundaciones, etc. Prevé el primer cierre para diciembre y el segundo para el primer trimestre de 2020.

El fondo estará alojado en la gestora de Afi, que “asumirá compliance, reporting y toda la parte de operaciones y estructuración. Además, Afi y sus socios van a ser inversores del fondo para acompañar de manera muy cercana a las empresas, ayudando en la fase de desarrollo de su plan financiero y comercial aprovechando nuestra amplia red de contactos”, explica Pablo Mañueco, socio de Afi.