Alejandro Varela (Renta 4): “La tesis de los emergentes fue muy válida a principios de siglo, y ahora va a volver a los mercados”

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¿Es oportuno tener renta variable en cartera en estos momentos? La respuesta es sí, según el consenso de expertos. Pero, ¿en qué geografías o sectores? Es ahí donde la contestación varía. Para Alejandro Varela, gestor en Renta 4 Gestora, una de las direcciones donde deberían apuntar los focos está clara: la renta variable emergente. “La tesis de los emergentes fue muy válida a principios de siglo, y ahora va a volver a los mercados”, confía, consciente de que la región sobre la que él es responsable en la firma, Latinoamérica, es a su vez la región que más tiene que demostrar.

Latam cuenta con muchos puntos a favor como mercado invertible, pero también con algunos contras. Estructuralmente, se puede aprovechar de su bonus demográfico, que contrasta con la situación de envejecimiento de los mercados desarrollados; de la baja penetración de productos y servicios, en un escenario económico convergente, y de su elevada exposición a un ciclo global que acelera, con mayores expectativas de inflación y con cierto énfasis en infraestructuras, donde el continente se ve especialmente beneficiado. Coyunturalmente también presenta el atractivo necesario, cuenta con momentum. “Hay una mayor estabilidad de las materias primas, los mercados son aún más competitivos fruto de la devaluación de sus divisas en los últimos años y el entorno político es más maduro, ya que se están desarrollando políticas favorables al mercado”, argumenta Varela.  Pero…

Para invertir en emergentes y, especialmente en Latam, siempre hay un pero. En este caso, varios: las nuevas políticas de Trump que amenazan el comercio global -países de la región como México podrían verse muy afectados al exportar en gran medida a Estados Unidos-, un ritmo de subidas de tipos de interés más rápido de lo esperado, el cambio de modelo socioeconómico de China como “amenaza latente” o la siempre presente corrupción política, muy vinculada recientemente a Brasil. A pesar de llevar el país carioca casi un año sin Dilma Rousseff en la presidencia, la nube política no se ha terminado de despejar. “Temo por Brasil a nivel político, por un vacío de poder si algo salpica a Michel Temer”, confiesa el gestor. “Económicamente, el país se puso las pilas con el cambio de presidencia y confío en que siga la tendencia. No obstante”, señala, “estoy moderando la exposición a Brasil porque en 2016 sus acciones corrieron mucho”.

Las proyecciones apuntan hacia crecimientos económicos en Brasil del 0,7% en 2017 y del 2,3% en 2018, y crecimientos en México del 1,4% este curso y del 2% el próximo. Además, la deuda pública media de Latam se sitúa en el 36% sobre PIB. El gestor implementa este buen contexto macro en los fondos Renta 4 Latinoamérica (que invierte en la Alianza del Pacífico y en Brasil) y Renta 4 MILA (sin Brasil). En el primero de ellos, sus mayores posiciones son compañías como Elektra, Vale, Petrobras, Electrobras, Coca-Cola Femsa o Braskem.

Renta variable global

Otros fondos de la casa que pueden recoger las buenas expectativas sobre la renta variable internacional son el Renta 4 USA, el Renta 4 Japón y el Renta 4 Acciones Globales, gestionados todos por Celso Otero. Respecto a este último, que recoge la visión más global de los gestores de renta variable de la firma, su responsable recuerda una idea básica: “El PIB mundial, a pesar de las distintas crisis que han existido, no ha parado de crecer en las últimas décadas a una tasa media del 3,5%”, desde 1980 hasta la actualidad.

Además, “al elegir compañías con presencia global, se dejan a un lado los problemas que pueda tener una economía en particular”, subraya. En la actualidad, el reparto geográfico de ventas de las empresas se distribuye en un 49% hacia América, en un 26% hacia Asia y Oceanía, en un 24% hacia Europa y tan sólo en un 1% hacia África.

En la práctica, considera Otero, “hablar hoy día de fondos geográficos o temáticos no tiene sentido, es más una restricción que una oportunidad, dado que las ventas de las empresas son globales”. Un ejemplo claro de esta tesis es EE.UU., realidad reflejada en el Renta 4 USA. “Sobre todo, tenemos megacaps y big caps. Para encontrar compañías con márgenes elevados o una posición dominante de mercado que cumplan tus criterios de inversión, por ejemplo, hay que irse a grandes compañías con muchas ventas fuera de EE.UU.”, justifica. Entre sus principales valores, aparecen nombres como Qualcomm, Gilead Sciences, Monster Beverage, Abbot Laboratories, Molson Coors Brewing o Medtronic.