Hace un año que Álvaro Hernández abrió la oficina de William Blair en Madrid con el objetivo de cubrir los mercados del sur de Europa (España, Portugal e Italia) y desarrollar uno de los pilares de negocio de la entidad americana: el asesoramiento de fondos alternativos a las gestoras.
Hace un año que Álvaro Hernández abrió la oficina de William Blair en Madrid con el objetivo de cubrir los mercados del sur de Europa (España, Portugal e Italia) y desarrollar uno de los tres pilares de negocio de la entidad americana: la banca de inversión. Las otras dos áreas son gestión de activos, negocio enfocado a EE.UU. y gestión de patrimonios, que en Europa se cubre desde Londres y Zúrich.
Álvaro Hernández, managing director de William Blair, se incorporó al equipo de banca de inversión de la entidad en 2019. Con una experiencia de 18 años, antes había trabajado para PricewaterhouseCoopers Corporate Finance, Rothschild y Societe Generale.
Asesoramiento a fondos de private equity
Explica Hernández que el grueso de la actividad de William Blair en Europa es la banca de inversión. A diferencia de otras entidades, “no somos un banco de balance, sino que nos enfocamos en el asesoramiento”. Cubren operaciones de M&A, salidas a bolsa o estructuraciones de deuda, aunque tienen un foco muy específico en el asesoramiento de fondos alternativos. En esta parte ayudan a las gestoras o GPs en procesos clave como la compraventa de empresas, el levantamiento de capital, gestión de inversores o LPs en operaciones de mercados secundarios, impulsadas por el gestor o por los propios inversores.
Un aspecto diferencial del negocio de William Blair en su actividad de asesoramiento es que cuentan con capacidades para acompañar a un GP en todo el proceso de vida de sus vehículos. Su expertise se centra en el middle-market.
El objetivo es hacer crecer su negocio en el sur de Europa, se debe a que “hasta hace un par de años había sido un mercado poco explorado por la firma”, explica. Tener presencia local en estos países, permite a la firma mejorar su servicio de asesoramiento a sus clientes globales , ya que fortalecen sus capacidades para cubrir de manera activa los mercados locales de Italia, Portugal o España.
Otro objetivo de negocio clave para Hernández es crecer en el asesoramiento de fondos domésticos que quieren expandirse en otros países. “El segmento del capital doméstico se ha profesionalizado muchísimo y muchos players locales como tienen hoy mandatos para invertir en mercados internacionales”.
Equipo global, especialización sectorial
Explica Hernández que lo que diferencia el negocio de William Blair de sus competidores es que “somos un equipo global con un fuerte enfoque de especialización sectorial”. “En cada una de las operaciones en las que asesoramos, ponemos a disposición de nuestros clientes equipos globales especializados en ese sector específico”
“Esto nos ha permitido en poco tiempo ganar cuota de mercado y mandatos”, señala, puesto que muchas veces se busca la especialización sectorial, frente al enfoque más generalista de otras entidades. Al mismo tiempo, el perfil de su cliente son GPs que tengan estrategias globales o activos en cartera de perfil internacional,
Visión de mercado
El grueso de la actividad de William Blair está en M&A, “una actividad que ha disminuido en 2023”, explica. La dificultad macroeconómica “ha hecho que el performance de las compañías no haya sido el idóneo para realizar desinversiones. En 2023 se encuentran que muchas de las compañías no han alcanzado el estado ideal para ponerlas en venta.
Hernández explica que en el sur de Europa hay muchos fondos que han agotado su vida y están en proceso de levantamiento de un nuevo fondo. “El mercado local se queda pequeño y buscan acudir a mercados internacionales. Aquí acuden a nosotros para asesoramiento de captación, gestión de secundarios, etc. Señala un importante aumento de la demanda de este tipo de servicios, además de servicios de estructuración de capital. “Compañías que no pasan por su mejor momento ante el reto macro actual, demandan que servicios de restructuración de capital para poder afrontar los próximos años con mayor solidez”.
Sin embargo, Hernández apunta a que en estos últimos meses del año se ha empezado a notar mayor voluntad inversora, la cual se espera materialice en 2024. “Más allá del convulso contexto geopolítico actual, un gran número de inversores han “normalizado” ya el entorno macroeconómico actual lo que unido a una mejor significativa en los mercados de deuda y las altas necesidades de inversión del capital privado, hacen prever un 2024 más dinámico en lo que a operaciones de M&A se refiere”.