Cambios en BBVA Banca Privada. La división dirigida por Jorge Gordo, que atesora cerca de 70.000 millones de euros, según el ranking de banca privada de Funds People, eleva su mínimo patrimonial de los 300.000 euros hasta los 500.000 euros. La apuesta de la entidad por el segmento de banca privada, donde se incluye también BBVA Patrimonios, dirigido para cliente con más de 2 millones, provoca también cambios en la estructura del banco.
A partir de ahora, cada una de las ocho divisiones territoriales del grupo (Centro, Noreste, Norte, Cataluña, Barcelona, Este, Sur y Canarias) tendrá un director de banca privada, el cual reportará directamente al director territorial, tal y como avanza Expansión.
La entidad dispondrá de 130 puntos especializados y ocho centros exclusivos de la división de BBVA Patrimonios, en las que se ubicarán un total de 500 banqueros privados, figura que hasta la fecha no existía como tal. En banca privada, cada banquero será responsable de 120 clientes y, en grandes patrimonios, de 25 grupos familiares. Actualmente, la división de banca privada cuenta con 50.000 clientes.
El objetivo del grupo con la banca privada es incrementar en un 25% su volumen en los próximos tres años.
Digitalización y servicio de planificación patrimonial
Otra de las novedades que se introducen en la banca privada, hasta ahora exclusivo para altos patrimonios, es el servicio de planificación patrimonial, donde se ofrece opiniones y consejos -no asesoramiento- sobre fiscalidad.
Por otro lado, la digitalización del banco también llega a la banca privada, donde se introducirá próximamente la firma electrónica en el contrato de asesoramiento. Asimismo, pondrán a disposición de los clientes herramientas que mida riesgos y oportunidades para su patrimonio.
Además, estos clientes ya pueden utilizar BBVA Valora Banca Privada, una aplicación que permite calcular el valor de un inmueble e incorpora otras funciones no disponibles para el resto de clientes, y BBVA Trader, para operar directamente en bolsa. También hay abierto un canal de comunicación privado entre banquero y cliente, a través de la web y una aplicación.
