Berkowitz y su fondo insignia se estrellan en 2011

Las tornas han dado la vuelta completamente para Berkowitz y este año su fondo estrella se deja con datos a mediados de noviembre un 26% frente al retorno plano que presenta el S&P 500. Este mal comportamiento se debe, en parte, al gran peso que tienen en cartera distintas compañías del sector financiero como Bank of America, Citigroup, Jefferies Group o Regional Financial. Además, distintos medios de comunicación estadounidenses apuntan otra posible causa: en 2008, Berkowitz nombró como cogestor y responsable de inversiones a un familiar suyo, dejando de lado a su equipo de análisis con el que había trabajado desde el comienzo de la firma. Charles M. Fernandez presentó su dimisión recientemente alegando motivos familiares, según informa Barrons, mientras que el antiguo equipo de análisis ha creado una nueva firma independiente.

El patrimonio de la firma se ha visto afectado tanto por el efecto mercado como por los reembolsos que está ya sufriendo y actualmente sus activos bajo gestión han disminuído hasta los 9.000 millones de dólares.

Según la ficha del fondo de septiembre, la última disponible, las diez primeras posiciones del fondo acumulaban el 82% del patrimonio, con su principal apuesta, American International Group, respresentando el 23,2%. El resto de las compañías en el top 10 son AIA Group, Sears Holdings Corp., Berkshire Hathaway, Brookfield AM, Bank of America, Citigroup, CIT Group, China Pacific Insurance y The St. Joe Co. A cierre de septiembre, el fondo perdía en el año un 32,4%.

¿Qué les pasa a los grandes gestores?

El mal momento por el que atraviesa Berkowitz coincide con la mala racha de otros grandes gestores como Anthony Bolton o Bill Miller. El primero volvió al mundo de la gestión en abril de 2010 para ponerse al frente de un fondo de renta variable china en su casa de toda la vida, Fidelity. Bolton se había ganado la etiqueta de gurú tras haber gestionado durante casi 30 años el Fidelity Special Situations (dic-1979 a dic-2007), con una rentabilidad histórica del 19,5% anual acumulativa.

Pues bien, su experiencia en China no está siendo todo lo satisfactoria que esperaba y a mediados de noviembre pidió disculpas por los resultados obtenidos. Desde lanzamiento, en marzo de 2010, el fondo ha perdido un 21%, por un descenso del 13% del MSCI China index. Según ha reconocido el gestor, su peor comportamiento se debe a su mayor peso en acciones small y mid cap y declara que se equivocó al pensar que la bolsa china podría desmarcarse de un comportamiento negativo de las bolsas europeas y americanas.

Por su parte, Bill Miller ha anunciado recientemente que en abril dejará su puesto como responsable de inversiones de Legg Mason Capital Management, cediendo la gestión de su fondo insignia, con 4.700 millones de dólares, a Sam Peters. Miller es otro de los grandes gurús de los últimos años por haber batido la rentabilidad del S&P 500 durante 15 años seguidos entre 1990 y 2005. No obstante, también ha visto últimamente cómo cambiaba su suerte y, en los últimos tres años, el LMCM Value Equity fund ha subido el 22% frente al 38,3% del S&P 500, su índice de referencia.