La gestora cambia la política de inversión del CaixaBank Fondtesoro Largo Plazo para incorporar una nueva estrategia de renta fija corporativa con duración cubierta.
Del fondtesoro a un fondo de renta fija de duración cubierta. El cambio de nombre y política de inversión del CaixaBank Fondtesoro Largo Plazo supone un claro ejemplo del proceso de especialización de las gamas de renta fija de las gestoras españolas.
En los últimos meses, han sido varias las entidades que han introducido nuevas estrategias a su catálogo de renta fija ante un nuevo escenario de tipos de interés, desde fondos de renta fija flotante hasta fondos con duración negativa, así como estrategias puras de activos antes residuales en las carteras de renta fija como la deuda subordinada.
La duración está en el punto de mira de las firmas nacionales, de ahí que CaixaBank AM haya registrado un nuevo fondo con duración cubierta de renta fija corporativa. La gestora ha utilizado la carcasa del CaixaBank Fondtesoro Largo Plazo, un fondo que invertía exclusivamente en deuda española, para crear un nuevo vehículo de renta fija privada. Según el nuevo folleto del fondo, el producto utilizará instrumentos financieros derivados para reducir la sensibilidad a las variaciones de los tipos de interés para que la duración objetivo se sitúe entre 0 y 1 año.
La exposición a renta fija privada será como mínimo del 60% pudiendo invertir el resto en valores emitidos por un Estado de la OCDE. El fondo invertirá principalmente en valores de renta fija privada, negociados en mercados europeos, así como otros grandes mercados internacionales, incluidos emergentes sin límite predeterminado. Por otro lado, las emisiones en las que invierta no tendrán rating mínimo.
Además, el fondo podrá invertir hasta un 5% en bonos convertibles, que pueden ser en su totalidad contingentes y emitidos normalmente a perpetuidad, el riesgo divisa podrá ascender al 10% y puede invertir hasta un 10% en otras instituciones de inversión colectiva.
El fondo llega con cuatro clases disponibles: clase cartera, estándar, plus y premium. Esta dos últimas son las únicas con mínimo de inversión, de 50.000 y 300.000, respectivamente. Las comisiones de gestión van desde el 0,33% de la clase cartera, hasta el 1.05% de la clase estándar. Por su parte, la clase plus y premium, tienen una comisión de gestión del 0,775% y del 0,625%