CapitalatWork: “La política expansiva de los bancos centrales nos obliga a asumir más riesgo del deseado”

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jurjen_nl, Flickr Creative Commons

Es bien sabido que los bancos centrales sostienen el sistema financiero e incrementan las valoraciones de los activos artificialmente, aunque la mayoría del sector da la bienvenida a las medidas monetarias expansivas que desvirtúan estas valoraciones. Sin embargo, desde CapitalatWork, advierten que esta tendencia no hace ningún bien a los inversores. “En contra de lo que debería ser, se ven más influenciados por el sentimiento del mercado o las intenciones que pueda tener algún banco central que por las propias valoraciones intrínsecas de los activos”, avisan.

En este contexto, ha explicado Lucas Monjardín, consejero delegado de CapitalatWork, “estas políticas expansivas nos obligan a asumir más riesgo del que quisiéramos, ya que los activos incrementan su valor de forma descontrolada generando una sensación de riqueza que no es tal”. Por tanto, añade Monjardín, “los inversores se ven tentados a tomar posiciones irracionales, guiadas por el sentimiento que marca el mercado, sin ningún tipo de sustento analítico, lo que a su vez, genera una alta rotación de activos y volatilidades desmesuradas”.

En este contexto, sentencia el consejero delegado, “la única forma de luchar contra esta situación consiste en tener una valoración efectiva y consistente de los activos, que te aísle de movimientos irracionales del mercado y te sirva de soporte para obtener rendimientos a largo plazo”.

En la misma línea y centrando su atención en renta fija, Miguel Llorente, gestor de patrimonios de CapitalatWork, ha explicado que “todos los bancos centrales, de forma progresiva, han ido aplicando políticas monetarias expansivas, conjugando tipos cercanos a cero y fuerte expansión de la masa monetaria, lo que lleva a la deuda a una posible situación de burbuja”.

En un momento en el que los fondos monetarios y la deuda soberana apenas tienen margen para generar rendimientos, Llorente apuesta por buscar oportunidades en deuda corporativa, donde muchas empresas se encuentran más saneadas incluso que los propios gobiernos, además de que los diferenciales de crédito, que aún se encuentran alejados de los mínimos, tienen cierto recorrido.

Llorente señala otros mercados interesantes fuera del euro como la corona noruega, el dólar y divisas locales de mercados emergentes, siendo clave ser selectivo en los activos y aprovechar las oportunidades que nos ofrezca el mercado. Eso sí, alerta que habrá que ser cuidadoso con la duración de la cartera ya que, al estar la curva en niveles tan bajos, una subida de tipos podría ser muy peligrosa, sobretodo en el largo plazo, aconsejando una duración media alrededor de los cuatro años.

Renta variable

Por último, Jaime Sémelas, chief analyst de la firma, ha ilustrado cómo la renta variable también se ha visto afectada por estas medidas y, para reflejarlo, señala dos indicadores que históricamente han adelantado la evolución de la economía a nivel mundial, como el Baltic Dry Index y los índices de materias primas. “En los últimos años, hemos visto como esta correlación ha ido desapareciendo”, apunta, al mismo tiempo que añade que, “mientras que los índices de renta variable han subido de forma imparable, estos indicadores se han mantenido en niveles bajos”.

“Estos bajos niveles de actividad económica deberían sugerir menores beneficios en las compañías y por tanto una menor valoración, lo que repercutiría en unos índices bursátiles más bajos. Sin embargo, nos encontramos con un escenario en el que, siendo el nivel de actividad y de beneficios bajo, el valor de los activos y los índices han aumentado recurrentemente”, subraya.

Esta situación provoca que los inversores se vean abocados a asumir mayores riesgos, adquiriendo activos sobrevalorados y disminuyendo las posibilidades de obtener rentabilidad. Ante esta situación, desde CapitalatWork, aconsejan basarse en el valor fundamental de las compañías, con capacidad para generar flujos de caja y estructuras de costes controladas. Para esto, será fundamental ser selectivos y buscar valores que no estén excesivamente caros y puedan generar rendimientos a largo plazo.