Claves del mercado energético en Europa: la visión de una gestora nórdica

Cedida por Evli Fund Management.

Europa se encuentra en un aprieto energético. Como vemos en el gráfico que comparten desde Evli, el peso de la energía en porcentaje de PIB es una losa importante sobre las economías europeas en mayor o menor grado. A Petter Von Bonsdorff, responsable de desarrollo de negocio internacional de la gestora nórdica, el contexto le recuerda a la crisis energética de los años 70, cuando la OPEC disparó los precios del gas y crudo. “El precio de los juguetes se disparó tanto que mi paga semanal no me daba para comprarme los soldaditos de plomo con los que me gustaba jugar”, cuenta. Ahora los precios del gas natural parecen haber tocado su pico, pero eso no quiere decir que vayan a volver rápidamente a los niveles de hace dos años. 

Y es que las complicaciones no cesan. El pasado lunes mismamente se detectó una fuga en el gasoducto Nordstream 1, fundado en 2011 por Rusia pasa por debajo del mar Báltico para evitar el peaje de Ucrania y Belarus. Como bien subraya Von Bonsdorff, este sabotaje intencionado compromete el suministro de gas por esta vía para los próximos 10 a 15 años. “No es algo que se pueda reparar en cuestión de días”, subraya. En su opinión, estamos ante un cambio estructural en como los países del norte de Europa consumen energía.

El lado positivo, por citar alguno, es que los gobiernos están dispuestos a dar un paso al frente y suavizar el golpe que se viene. No solo con paquetes de ayuda sino intentando prepararse para un invierno duro. Lo vemos por ejemplo en los niveles de reserva de gas que se han ido rellenando durante el verano. Hay países como Alemania que ya tienen las reservas al 90% mientras que Italia o España también superan el 80%. “Pero por eso están también bajando los precios. No se está comprando tanto gas porque ya no hay donde almacenarlo”, explica Von Bonsdorff. Y algo similar ocurre con la electricidad. “Solo que con el apunte de que la electricidad no se puede almacenar sino que se tiene que usar inmediatamente”, recuerda el experto.

Así las cosas, los precios forward del mercado energético en Europa nos vaticinan un invierno complejo. Si bien hay regiones como los nórdicos o España cuya curva no es tan dramática, otras como Francia siguen altas.

El caso nórdico

Este escenario europeo contrasta fuertemente con el que se mueven sus vecinos nórdicos. A diferencia de Europa, los países nórdicos son exportadores netos de energía. “Muchas compañías nórdicas son autosuficientes energéticamente”, cuenta Von Bonsdorff. Varios grandes nombres del sector de la pulpa, papel o el metal, por ejemplo, incluso tienen sus propias plantas generadoras. “Durante mucho tiempo no había mucha diferencia. Ahora esta resiliencia en su independencia energética es estratégica”, afirma el experto.