¿Cómo aplicar las enseñanzas del behavioral finance a la gestión de carteras? Un caso práctico

bombilla

Aunque aún son minoría, ya son varias las gestoras de fondos integran el concepto de las finanzas conductuales o behavioral finance –una disciplina que combina neurociencia, psicología y economía para intentar comprender qué motiva la toma de decisiones entre los inversores– en sus procesos de selección de acciones y bonos.

Una de ellas es J.P. Morgan Asset Management, que cuenta con su propia división especializada en behavioral finance y con una gama de fondos diseñados específicamente a partir de los principios de las finanzas conductuales: los Intrepid. Desde la gestora enfatizan dos aspectos clave para garantizar que las decisiones de inversión respondan siempre a criterios objetivos.

El primero es mantener el mismo proceso de inversión, independientemente de lo que ocurra en el mercado. El segundo implica establecer procesos que restrinjan la posibilidad de tomar decisiones irracionales. En J.P. Morgan, por ejemplo, el proceso de optimización de carteras hace que los fondos muestren ciertos sesgos. Si un gestor quiere ir en contra de esos sesgos, tiene que hacerlo expresamente. Como apunta el gestor de carteras Phil Hart, “la mayoría de la gente no tiene la fuerza de voluntad para hacer algo en situaciones de estrés a menos que lo hayan decidido previamente”.

Dennis Ruhl, director de inversiones de la división de behavioral finance añade que formalizar el proceso resulta crucial, ya que permite tener “una luz, un faro por el que guiarse en la oscuridad”. En la casa estadounidense practican qué hacer durante una corrección del mercado y cómo reaccionar ante diversos acontecimientos. Ruhl explica que el grupo usa diversas técnicas para mantener la calma en los momentos de pánico.

Por ejemplo, el equipo de behavioral finance pone por escrito tanto la tesis de inversión en cada posición como las condiciones para su venta, un sistema que les llevó a ir en contra del sentimiento general del mercado y ampliar sus apuestas value durante las correcciones de febrero.