Según ING IM, el capital social de las empresas se está convirtiendo en un lastre para la rentabilidad. "La inversión en nuevas estructuras (por ejemplo, maquinaria) podría ser más gratificante desde el punto de vista de la productividad".
Los accionistas se han estado beneficiando de los fuertes balances de las empresas, principalmente a través de la recompra de acciones. En ING Investment Management observan un aumento de los dividendos y las fusiones y adquisiciones. “A corto plazo esto es bueno pero, para un crecimiento sostenible necesitamos ver un repunte en la inversión empresarial. En particular, en Estados Unidos las perspectivas parecen buenas”. Pero… ¿cuáles son los conductores del capex?
Para la gestora holandesa, la respuesta es un mayor crecimiento nominal, un aumento de la utilización de la capacidad, márgenes más altos y mayor facilidad en los estándares de préstamos para empresas. “El capital social de las empresas se está convirtiendo en un lastre para la rentabilidad. La inversión en nuevas estructuras (por ejemplo, maquinaria) podría ser más gratificante desde el punto de vista de la productividad. Pero, sobre todo, la confianza empresarial necesita mejorar”.
Según ING IM, un elemento adicional que no puede pasarse por alto es el retorno de las inversiones en el extranjero de vuelta a los Estados Unidos en detrimento de los mercados emergentes. “Esto atañe a los desafíos a los que los mercados emergentes se enfrentan actualmente. El aumento del coste de mano de obra, las tensiones sociales y políticas en varios países, la falta de reformas y, en general, una ralentización del crecimiento, ha hecho que la inversión en mercados emergentes sea menos atractiva que antes”.
La evolución del esquisto en Estados Unidos podría ser –según la gestora- otra razón para aumentar el capex en la economía doméstica. “Esto debería ser positivo para el crecimiento de Estados Unidos y, por lo tanto, para los beneficios empresariales. En un entorno en el que el crecimiento de beneficios se convertirá en el conductor principal de la rentabilidad de las acciones, este es un elemento crucial. Desde un punto de vista sectorial, esperamos que los sectores que más se beneficien de esta situación sean el industrial, tecnológico y financiero”, explican desde la entidad.