La incertidumbre macroeconómica y geopolítica está impulsando el interés en estrategias multiactivo. Desde Amundi comentan cómo se están posicionando sus carteras en 2025 y qué oportunidades detectan en renta variable, renta fija y materias primas.
La inversión en mercados financieros nunca ha estado exenta de incertidumbre, pero 2025 se perfila como un año especialmente complejo. Factores macroeconómicos, geopolíticos y la evolución de la política monetaria están obligando a los inversores a replantearse su asignación de activos.
David Greene, director de Investment Specialists Multiactivo en Amundi, señala que los clientes buscan alternativas ante la caída de los tipos de interés sobre los depósitos. “Hace dos o tres años, muchos inversores trasladaron su dinero a cuentas remuneradas, aprovechando los elevados tipos. Pero ahora que los bancos centrales han empezado a recortarlos, se preguntan cuál es el siguiente paso”, explica.
Este entorno ha favorecido el resurgir del interés por los fondos multiactivo. “Nadie quiere estar completamente invertido en renta variable, sobre todo cuando el mercado está concentrado en unos pocos valores”, señala Greene. “La diversificación es clave, y el multiactivo ofrece una solución óptima para mitigar riesgos y captar oportunidades en distintos mercados”.
Oportunidades selectivas en renta variable
Aunque el mercado de renta variable ha mostrado fortaleza, Greene advierte que el crecimiento ha estado impulsado por un grupo reducido de compañías, especialmente en EE.UU. “El S&P 500 ha subido de manera impresionante, pero si lo analizamos en términos ponderados, la historia es diferente. Hay oportunidades en sectores menos explotados, como los bancos o las medianas y pequeñas compañías”, afirma.
Europa, tradicionalmente infraponderada en las carteras, comienza a captar la atención de los inversores. “El mercado europeo ha sido barato durante mucho tiempo, pero ahora el diferencial con EE.UU. se ha ampliado tanto que se está volviendo atractivo”, explica Greene.
Entre los factores que podrían impulsar a Europa destacan:
- Expectativas de beneficios más razonables: Mientras que en EE.UU. el consenso apunta a un crecimiento del 16% en beneficios, en Europa el mercado solo espera un 5%, un objetivo mucho más alcanzable.
- Menor sobrevaloración: A diferencia de EE.UU., los múltiplos de valoración en Europa son más bajos.
- Interés creciente de inversores asiáticos: “Hemos visto gestores asiáticos que comienzan a preguntar por oportunidades en Europa. Esto no ocurría desde hace 15 o 18 meses”, comenta Greene.
Renta fija: ajustes estratégicos en la cartera
En renta fija, los inversores han pasado dos años esperando la caída de los rendimientos de los bonos sin éxito. El debate sobre la dirección de los tipos de interés sigue abierto, con posturas divergentes entre EE.UU. y Europa.
“El BCE tiene un camino más claro hacia los recortes de tipos, mientras que la Reserva Federal sigue en pausa y podría incluso enfrentarse a nuevas presiones inflacionarias”, advierte Greene. Ante este escenario, Amundi ha modificado su asignación en renta fija:
- Mantienen exposición a duración, pero con un sesgo hacia Europa.
- Reducen exposición a EE.UU. y concentran las posiciones en el tramo corto de la curva para mitigar la volatilidad de los tipos largos.
“La clave es ser selectivo y no asumir riesgos innecesarios en un mercado que sigue incierto”, concluye.
Fondos multiactivo: la clave para afrontar la incertidumbre
Después de los desafíos de 2022, los fondos multiactivo han comenzado a recuperar la confianza de los inversores. “Ese año fue complicado porque tanto acciones como bonos cayeron al mismo tiempo, lo que llevó a muchos a cuestionar la efectividad de la diversificación”, recuerda Greene.
Sin embargo, los datos históricos muestran que los años posteriores a una caída en multiactivos suelen ser de fuerte recuperación:

Greene destaca tres estrategias que pueden encajar en distintos perfiles de inversor. Para aquellos que buscan una alternativa conservadora a los depósitos, los fondos de renta fija con sesgo defensivo son una opción atractiva. Los fondos multiactivo conservadores, con un 80% en renta fija y 20% en renta variable, resultan ideales para inversores que desean estabilidad con algo de exposición a acciones. Para quienes buscan mayor rentabilidad, los fondos multiactivo dinámicos, con hasta un 50% en renta variable y exposición a commodities y divisas, ofrecen un perfil más arriesgado, pero con potencial de crecimiento.
“El inversor ha de preguntarse qué quiere lograr y elegir el fondo adecuado para su perfil. Las estrategias multiactivo no son todas iguales y en Amundi nos diferenciamos por combinar posiciones direccionales con estrategias de valor relativo”, señala Greene.
Perspectivas para 2025: riesgos y oportunidades
De cara al futuro, Greene identifica dos grandes riesgos para el mercado. El primero es un posible resurgir de la inflación en EE.UU., lo que podría llevar a la Reserva Federal a mantener los tipos de interés elevados o incluso subirlos, afectando tanto a renta fija como a renta variable.
Otro factor de incertidumbre es el impacto de las políticas económicas de EE.UU. en los mercados globales. Aún no está claro qué medidas tomará la administración en comercio, regulación y fiscalidad, ni su efecto sobre la inflación y los tipos de interés.
Reconoce que en los últimos años el interés por los mercados privados ha crecido entre los inversores institucionales y de alto patrimonio, y reconoce que Amundi está explorando este segmento pero con un enfoque prudente. “Todavía no hemos incorporado activos privados en nuestras estrategias multiactivo, pero es un tema en nuestro radar para 2025”, señala.
No obstante, también detecta oportunidades. La bajada de tipos del BCE favorece la renta fija europea y crea un entorno más estable. Los mercados emergentes siguen mostrando potencial, aunque la selección de países será clave. Además, el oro y las materias primas actúan como cobertura ante la volatilidad. “La incertidumbre hace que los fondos multiactivo sean más necesarios que nunca”, concluye Greene.