Entrevistamos a Ángela Pérez, presidenta y CEO de COFIDES, entidad gestora del FIS (Fondo de Impacto Social) que destinará 400 millones de euros a la inversión de impacto en España.
La presidenta y consejera delegada de COFIDES, Ángela Pérez, fue la responsable de la apertura del V Camino al Impacto, evento organizado por SpainNAB que reunió al ecosistema de la inversión de impacto en España. En un encuentro con FundsPeople, hemos podido conocer más detalles sobre el FIS, el Fondo de Impacto Social que gestiona su entidad.
Cuenta con una dotación de 400 millones de euros, que provienen de los fondos Next Generation Europe incluidos en la adenda del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), con el fin de consolidar la reindustrialización estratégica del país. “Los objetivos del FIS son apoyar la economía de impacto y fortalecer el ecosistema de emprendimiento social”, señala Pérez.
Objetivos
El FIS invertirá en “proyectos rentables con una clara intención de contribución a la solución de retos sociales y medioambientales desatendidos y que generen un impacto medible y estará plenamente operativo próximamente. Esperamos poder aprobar las primeras operaciones a finales de año”, detalla.
Como punto de partida, desde COFIDES han hecho un trabajo de mapeo a través de la teoría del cambio para definir los retos sociales y medioambientales que son más prioritarios en España. “Esa teoría del cambio ha sido elaborada por los expertos del equipo de impacto y del FIS de COFIDES, con la colaboración de asesores externos y de los principales actores del ecosistema de la inversión de impacto”, explica la directiva. Además, en el diseño del fondo se ha tenido en cuenta la opinión y la experiencia de múltiples actores y agentes del ecosistema del impacto como SpainNAB y de iniciativas similares de otros países, como el Fondo Portugues de Inovaçao Social o el Fondo Big Society británico.
“El FIS se crea con el fin de dinamizar y reforzar el ecosistema nacional de inversión de impacto para resolver retos sociales y medioambientales a los que se enfrenta nuestra sociedad como la integración territorial y social, la reducción de las desigualdades o la consolidación del estado de bienestar mediante el fortalecimiento de la economía y las empresas con propósito social” afirma.
Inversión directa y a través de fondos
La principal característica del FIS es su flexibilidad. La inversión será directa en empresas o entidades o indirecta a través de fondos u otro tipo de vehículos de inversión. El apoyo financiero puede tomar la forma de suscripción de participaciones en fondos, participación en capital o instrumentos de deuda y las cantidades invertidas pueden ir desde 300.000 euros a 50 millones. Ya cuentan con 35 solicitudes. “Hay más de fondos que de empresas, pero estamos trabajando en una mayor difusión de la existencia del fondo, para llegar a más empresas y entidades de la economía social que hacen un trabajo impresionante”.
Profesionalización
El fondo contempla la creación de una Facilidad de Asistencia Técnica de unos ocho millones de euros destinada a la mejora de las capacidades de los beneficiarios para fortalecer los sistemas de medición de impacto. El objetivo de esta asistencia técnica es que las entidades beneficiarias del FIS puedan capacitarse en materia de gestión y medición de su impacto, así como en gestión financiera para el mejor uso de los recursos del FIS y de otros instrumentos financieros. De este modo, contribuirá a que los inversores e intermediarios se profesionalicen, mejoren sus metodologías de análisis y control y que evalúen sus datos de impacto.
“Promover esa profesionalización es clave para ayudar a dotarse de medios y recursos que faciliten el crecimiento de la economía de impacto en España”, apunta. En cuanto a la medición del impacto, admite que es un reto: “Se trata de ir entendiendo cada modelo de negocio para poder medir las variables clave. En muchas ocasiones es un arte y hay que utilizar proxys. Se parte de un análisis financiero para ir desarrollando distintas metodologías”.
El ecosistema del impacto en España
En su puesto desde julio, a Ángela Pérez le ha llamado la atención lo movilizado y coordinado que está el ecosistema del impacto en España, destacando su actitud colaborativa. Considera que “sus conexiones internacionales son muy destacables y reflejan una España moderna”. Además, destaca el entusiasmo que ha percibido: “La propia actividad atrae a gente así y hay que cuidar que eso no se pierda”.