Hace un año, el exbaloncestista Ferrán Martínez fichó por Mirabaud para crear la unida de banca privada especializada en deportistas y artistas, una unidad muy especial dentro del banco suizo, en la que las cosas se hacen “de otra manera". “El funcionamiento de la banca privada para deportistas es distinto al de otros clientes”, explica Martínez. Él lo sabe por experiencia pues durante años fue deportista de élite y ahora se dedica precisamente a asesorar a aquellos que lo son hoy en día. “Son personas con características particulares”, explica. “Por ejemplo, los deportistas ganan mucho dinero al principio y luego se jubilan jóvenes, mientras que en el caso de los artistas son personas que ganan de manera irregular”.
Además, son mundos en los que funciona el boca-oreja, pues son círculos cerrados, en los que la confianza es un valor fundamental. “Buscan un servicio personalizado, con mucha discreción y con disponibilidad máxima”, explica Ferrán, de manera que él está en permanente contacto con sus clientes, quienes suelen preferir tratar con un único interlocutor, en este caso él mismo.
Cómo ha llegado Martínez a este trabajo es, cuanto menos, peculiar. Durante sus años de carrera (jugó en el Barcelona, el Joventut y el Panathinaikos) tuvo claro que tenía que seguir con sus estudios y, además, se obligó a comprar una propiedad cada año, de manera que pudo ir haciéndose su patrimonio para cuando se jubilara. Durante su etapa en el Panathinaikos, un banco le perdió el 40% de su patrimonio por malas inversiones. En ese momento, decidió estudiar y especializarse en gestión, de manera que tomó las riendas de su dinero. Ante el éxito que tuvo en sus inversiones, el suizo UBS le fichó para llevar la relación con deportistas. Pasó posteriormente a Banco Sabadell pero quería una entidad más global y de banca privada pura, por lo que, el año pasado, se incorporó a Mirabaud.
“Mirabaud es perfecto porque no hay conflicto de intereses así que podemos hacerles, de verdad, un traje a medida a cada cliente y además darles servicio de manera global, pues la entidad tiene presencia en las principales plazas financieras del mundo y, además, tiene una larga historia de experiencia, lo que da confianza”, explica Martínez.
Martínez destaca que es fundamental ir de la mano del círculo más cercano del deportista, de la gente de la que se suele rodear, como sus abogados, fiscalistas, representantes, etc. Una vez dentro de ese círculo de confianza, Mirabaud se convierte en gestión parte financiera del deportista. “La clave es hacerles una buena planificación financiera y concienciarles de que hay que ahorrar poco a poco porque, si no, es difícil que una vez se retiren puedan mantener su ritmo de vida”, dice.
Suelen construirles carteras de inversión conservadoras y con una gestión activa, porque en estos casos el periodo hasta la jubilación suele ser más corto que para el resto de personas. Además, sus circunstancias suelen cambiar, bien porque tienen nuevos contratos o firman para ser imagen de alguna marca, etc. “La clave es acertar en la construcción de la cartera y que no tomen más riesgos de los necesarios”, resume Martínez.
