“El largo declive vivido por las acciones fue un movimiento generacional que ya ha terminado”

broker
JaulaDeArdilla, Flickr, Creative Commons

Los aniversarios son, por norma general, momentos para descorchar champagne. Pero la celebración de Wall Street de los cuatro años de mercado alcista desde el 9 de marzo de 2009, cuando los índices fijaron mínimos, se ha visto atenuado por el hecho de que el tecnológico Nasdaq continúe cotizando un 37% por debajo de sus máximos alcanzados el 10 de marzo del año 2000. Algunos aniversarios sirven simplemente para recordar tiempos mejores. En este caso, sirve para rememorar la euforia vivida por el Nasdaq tras alcanzar máximos en los 5.000 puntos antes de que el índice se estrellase tras el estallido de la burbuja tecnológica.

Para muchos inversores hay motivos para la celebración, al existir una buena razón por la que brindar por el mercado y maravillarse con su capacidad de recuperación. “Los inversores deben estar contentos por esto”, asegura Ron Sloan, director de Inversiones de renta variable ‘core’ de Estados Unidos de Invesco Asset Management. Al analizar estos datos, los escépticos dirán que desde el año 2000 no se ha hecho nada de dinero, ya que actualmente los índices bursátiles americanos están en niveles similares a los de hace 13 años e incluso por debajo. “Pero eso no es en lo que hay que centrarse. Los inversores deberían mirar al futuro”, subraya.

Sloan argumenta que la conocida como la década perdida para la renta variable no es más que la reducción del ratio de precio-beneficio (PER) y un éxodo masivo de dinero del mercado, que ahora hace pensar en un futuro más brillante. “El largo declive vivido por las acciones fue un movimiento generacional, que ya ha terminado. Esa es la verdadera historia. Creo que los próximos 20 años la evolución de los mercados estará más cerca del mercado alcista vivido entre los años 1982 y 2000 que en una repetición de lo sucedido entre el 2000 y el 2013”, asegura al diario USA Today el experto de la gestora estadounidense.

Pero, ¿cuáles serían los aspectos que harían pensar en una continuidad de este comportamiento bursátil? En primer lugar, la exuberancia irracional, que suele matar a los mercados alcistas, no está presente en la actualidad. A esto habría que añadir que las rentabilidades históricamente bajas ofrecidas por los bonos del Tesoro de Estados Unidos hace que otros activos no le hagan realmente la competencia a la renta variable. También es significativo el hecho de que el PER, indicador que señala cómo de caras o baratas están las acciones, se mueva en estos momentos por debajo de las 15 veces, la mitad de lo que lo estaba en sus máximos de 2000.