Su vida profesional se ha desarrollado entre San Sebastián y Madrid. Son dos ciudades en las que se encuentro muy a gusto, pero dado que estas ciudades son muy conocidas, Antxón nos habla de su pueblo natal, "villa para ser más precisos", puntualiza. Esa es Tolosa que está prácticamente el centro de la provincia de Gipuzkoa. Tiene 20.000 habitantes aproximadamente, pero estos se duplican prácticamente si añadimos los múltiples pueblos que hay en la comarca: Berastegui, Alkiza, Berrobi, Albiztur, Ikaztegieta, Amezketa...... y así una interminable lista. "Todos ellos con su encanto y particularidad", comenta.
Destaca de Tolosa su Casco Viejo. Villa amurallada en su día, posee distintos elementos que le dan una categoría propia de una población que fue capital de Guipúzcoa en el siglo XIX. Enumera distintos lugares dignos de ver: la parroquia de Santa María, el mercado de abastos, el Palacio de Idiáquez, el Palacio de Aramburu, su plaza Nueva y la plaza Euskal Herria donde Napoleón estuvo alojado durante la guerra de la Independencia. Perderse por las calles Emperador, Herreros, Arosteguieta y Correo es una delicia. Una parada obligada es su plaza de toros, que fue construida en 1903 y es una bombonera.
Dos momentos importantes para el pueblo son: los Carnavales y las fiestas patronales de San Juan.
Cuando hablamos de comer, Antxón destaca el HIKA de Amasa. Un lugar obligado, con una gran gastronomía, un paisaje memorable y regentado por Roberto Ruiz, sabio, versátil y generoso.
Además, quiere reivindicar a Tolosa como el origen de la txuleta que tanto se ha universalizado. El Julián de Tolosa, con dos sucursales en Madrid, el Asador Nicolás y El Burruntzi son templos obligados.
"No dejéis de incluir Tolosa en vuestra agenda de viajes", finaliza.
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