El trust: algunos conceptos importantes a tener en cuenta

El manejo de dinero bajo la modalidad del trust tiene su origen en el fideicomiso romano y se consolida en la Edad Media. Desde un principio, fue visto como una manera de trasnferir bienes y derechos a un tercero, para la gestión del mismo.

¿Qué es un trust? Es un acuerdo legal en el cual una persona, conocida como settlor, transfiere la titularidad de sus activos a otra parte, conocida como trustee.

El trustee debe mantener y administrar los activos en beneficio de aquellas personas designadas como beneficiarias. El trustee adquiere la titularidad legal de los activos transferidos. Deberá administrar los activos de acuerdo a las normas de la jurisdicción y conforme a las instrucciones dadas por el cliente en la "Letter of Wishes".

¿Quiénes son los sujetos intervinientes?

Settlor: es aquella persona que transfiere la propiedad de sus activos a favor del trustee.

Trustee: es aquel sujeto obligado a administrar los activos en beneficio de las personas designadas como beneficiarias. El trustee adquiere la titularidad legal de los activos transferidos. Deberá administrar los activos de acuerdo a las normas de la jurisdicción y conforme a las instrucciones dadas por el cliente en la "Letter of Wishes".

Beneficiario: es el futuro dueño de los activos transferidos.

Protector: es aquella persona de confianza designada por el settlor, que ejerce el control sobre la actuación de los trustees. El protector tiene derecho a vetar decisiones de los trustees y también debe otorgar su consentimiento expreso en ciertas situaciones, para que el trustee pueda cumplir con determinadas decisiones (ej.: dar pagos a los beneficiarios).

¿Cuáles son las ventajas de constituir un trust?

Planificación sucesoria: en muchos países, la ley indica que cuando una persona muere, cierta parte de su patrimonio debe transferirse a los herederos forzosos. Dado que los activos transferidos al trustee ya no forman parte del patrimonio del cliente, tampoco deberían formar parte de su sucesión. Por ende, la transferencia de los activos se realiza de manera rápida, evitándose procedimientos sucesorios largos y costosos. Además, se podría designar a cualquier beneficiario.

Planificación Impositiva: cuando una persona transfiere activos al trustee, estos se convierten en los dueños de esos activos. Dado que el cliente dejó de ser el dueño de esos activos, puede estar exonerado de declarar dichos bienes en sus declaraciones de impuestos y de abonar impuestos sobre los mismos. Cada cliente debería recibir asesoramiento tributario especializado para determinar las implicaciones tributarias de constituir un trust.

Planificación sucesoria más allá de la muerte: el trust es una herramienta muy útil cuando el cliente quiere que una institución con experiencia y supervisada administre los activos transferidos a su muerte, de acuerdo con las instrucciones dadas por el cliente en la "Letter of Wishes" (por ejemplo: educación, salud, pagos mensuales).