“España realiza el trabajo sucio de invertir en la formación de profesionales para exportarlos”

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Cedida por EFPA

“Se está produciendo una profunda profesionalización del sector, donde ya no sirve la multidisciplinariedad. El mercado demanda profesionales expertos en asesoramiento financiero, en análisis, en riesgos, en banca personal, en fiscalidad, etc...No un rey sol que abarque todos los negocios de una entidad”. Borja Rubí, gestor patrimonial y mención especial del jurado en el concurso de artículos de opinión organizado por EFPA/Funds People se muestra muy claro sobre el presente y el futuro del asesoramiento financiero. Pero si hay algo que especialmente le preocupe es la salida forzosa al extranjero de profesionales altamente capacitados que en España no encuentran trabajo.

En una entrevista concedida a Funds People tras el cierre de la edición anual del concurso, Rubí afirma que “la formación Universitaria en España es una fábrica que produce universitarios con alto grado de cualificación pero que nadie contrata en España. Esto provoca una emigración forzosa a otros países donde sí necesitan estos profesionales. España, por tanto, realiza el trabajo sucio de invertir en la formación de los profesionales para exportarlos”.

En su opinión y utilizando un símil con el análisis técnico, el panorama económico está “en una situación lateral”. “Quizá estemos a punto de romper el canal bajista de los últimos años”, explica, “pero lo que parece más claro es que nos espera una época de periodos laterales en la economía. Esto es, seguiremos tocados pero no hundidos”. Aun así, cree que a corto plazo “el principal problema que debería atajarse es el desempleo, especialmente el juvenil”. Un problema que para Rubí también debe verse desde la óptica de la merma de ingresos que esto supone para un Estado, ya que los profesionales que se ven empujados a salir fuera dejan de pagar impuestos y de gastar en España y, como la pescadilla que se muerde la cola, las empresas reducen sus ventas, también sus impuestos y finalmente sus plantillas. “Los que pueden tirar del carro ya no están. Ni empresarios ni jóvenes cualificados. Esto es un problema capital”.

Los cimientos de una nueva banca

A la hora de abordar los cambios a los que se enfrenta el asesoramiento financiero, Rubí apunta ciertas dosis de optimismo, “pese a estar en una situación de enormes dificultades para el sector, el asesoramiento financiero está cotizando a unos PER muy atractivos para lograr una revalorización muy importante en el corto-medio plazo. Las entidades financieras, se están dando cuenta que el modelo antiguo de negocio ya no sirve y se están comenzando a implantar los cimientos de una nueva banca”. Aunque no se considera especialista en dar proyecciones, viendo los últimos movimientos de la banca internacional en España y la remodelación de negocio bancario nacional, Rubí augura la implantación de “un modelo cuasi anglosajón”, esto es, “menos oficinas, mas grandes y con auténticos especialistas en diversas materias. Se acabó el vale todo”. Del mismo modo, tampoco cabe hablar de un mismo paraguas de inversión para todos ni confía en el producto financiero perfecto. En su opinión, “estamos en una situación y en un sector que demanda un traje a medida para el cliente, con los productos y servicios que mejor se adaptan al perfil de éste y no al perfil de su asesor”.

Formación continua, paciencia y pasión son los tres puntos clave que todo asesor financiero debe tener, una profesión que Rubí lamenta que no siempre se vea suficientemente reconocida. Paciencia “para aguantar los mercados y las situaciones laborales como la presente” y pasión para ver “desafíos y retos en las diferentes dificultades”, explica. Precisamente, por esa falta de reconocimiento de la labor del asesor financiero, Rubí desearía algo más de implicación por parte de los profesionales en iniciativas como el concurso organizado por EFPA y Funds People.

“Pertenecer a una asociación no es solo una cuestión de recertificación. Creo que una mayor implicación, ayudaría en muchos caso a mejorar la imagen social de la banca y a evitar el pago de justos por pecadores. Hay muy buenos profesionales con ganas de hacerlo bien”, señala. En este sentido, Rubí destaca que el hecho de haber participado en el concurso ha aumentado su notoriedad en el sector, “algo muy complejo para un perfil junior”, añade. Pero, por encima de todo, le ha supuesto una vía de escape a un cambio de país, de cultura y de relación laboral. Y es que Borja Rubí es uno de esos jóvenes formados en España, pero cuya formación está siendo aprovechada, en este caso, por la plaza financiera andorrana.