La firma ha anunciado una bajada de sus comisiones totales en los planes de pensiones desde el 0,64% hasta el 0,54% anual, incluyendo la gestión, depositaría, gastos corrientes y otros gastos. El punto de partida ha sido la reducción de las desgravaciones a planes de pensiones anunciada por el Gobierno, desde 8.000 a 2.000 euros al año, una coyuntura en la que Finizens busca “poner nuestro granito de arena para ayudar a las personas y pequeñas familias a reforzar su colchón financiero”, ha explicado Giorgio Semenzato, CEO y cofundador de Finizens.
Ofrece cinco planes de pensiones distintos para cubrir todos los perfiles de riesgo de sus inversores que invierten en más de 14.700 posiciones distintas, invirtiendo en renta fija (bonos de gobiernos Europa, bonos corporativos Europa y bonos internacionales), renta variable (acciones en Europa, EE.UU., Japón y Países Emergentes), y bienes reales (oro físico y sector inmobiliario global vía REITs).
Según Inverco, a cierre de 2019 había 116.419 millones de euros invertidos en planes de pensiones en España, de los cuales 79.850 millones de euros se encuentran invertidos en planes de pensiones individuales, con 7,5 millones de partícipes netos. Sin embargo, de acuerdo con un análisis conducido por Finizens a partir de datos de Morningstar, a fecha de hoy un 58% de todos los planes de pensiones españoles siguen cobrando la comisión máxima legal para su categoría de inversión.
“Queremos romper el oligopolio bancario porque es muy dañino, cuando hay pocos players en el mercado hay menos competencia en costes”, arguye Semenzato. Según sus cálculos, la gestión pasiva en Europa tiene una cuota en planes de pensiones del 20%, por lo que el objetivo a medio plazo en España es alcanzar los 16.000 millones de euros.
En cuanto a planes de empleo, Semenzato opina que “es un sector todavía mas cautivo y obsoleto en España” y avanza que “es fundamental para fomentar el ahorro privado y nos posicionaremos para poder aportar nuestro granito de arena”.
en su opinión, “el coronavirus está acelerando una tendencia que se estaba viviendo durante los últimos años, la digitalización y la búsqueda de mayor eficiencia en todos los sectores. En particular en el sector financiero, ha impulsado el cierre de oficinas y el auge de la gestión pasiva”, ha asegurado.
