En la cartera, Willem Vinke está tratando de evitar el exceso de riesgo al no tomar grandes posiciones de acciones individuales o riesgos macro en términos de exposiciones largas a uno o dos países.
El Sturdza Strategic Europe Value no es un fondo que destaque por tener un elevado patrimonio en España, pero sí por la consistencia mostrada por el producto a lo largo de los últimos años, lo que un año más le está permitiendo disfrutar de la distinción de fondo Consistente Funds People (alfa a tres años de casi el 1%). Por ese motivo resulta interesante seguir de cerca los movimientos de cartera realizados por su gestor, Willem Vinke, quien se centra en encontrar empresas de alta calidad a precios reducidos según el precio objetivo que ellos estimen para cada acción.
Lo más destacado del gestor de este producto de la boutique suiza E.I. Sturdza es el importante cambio de visión de mercado que ha dado en los últimos tiempos. “El riesgo macro y político ha aumentado”, afirma Vinke. En su opinión, el ajuste monetario en Estados Unidos sigue siendo una preocupación creciente, y es probable que haya presiones deflacionistas y un impacto en los mercados emergentes, mientras que el sistema económico global está altamente apalancado y, en un entorno de tipos de interés al alza, esto hace que el sistema sea muy frágil y vulnerable a los impactos.
Pero quizá el mayor riesgo lo ve en Europa. “La Unión Europea muestra más grietas. La política monetaria y las políticas de inmigración son los principales problemas. Nos preocupa la situación en Italia, por lo que no hay exposición al mercado de renta variable transalpino en la cartera”, revela. A su entender, hasta ahora el mercado no ha ido demasiado lejos, existiendo una gran dispersión entre sectores. “Sin embargo, dentro de Europa estamos viendo que las acciones comienzan a tener un rendimiento inferior”, indica.
En la cartera, el gestor trata de evitar el exceso de riesgo al no tomar grandes posiciones de acciones individuales o riesgos macro en términos de exposiciones largas a uno o dos países. “Tenemos una fuerte preferencia por las compañías internacionales; la cartera está larga de dólar estadounidense en comparación con nuestro índice y con otros competidores. Esta visión se ve reforzada por la foto macro que estamos viendo en este momento”, señala Vinke. Durante los meses de marzo y abril Vinke se encontró con dos problemas específicos en dos acciones: PMI y Pandora.
“PMI tuvo su peor día desde que se separó de Altria en 2008. Los resultados del primer trimestre fueron mixtos, ya que el crecimiento de iQOS se desaceleró en Japón; PMI no esperaba que el crecimiento de la cuota de mercado se estabilizara, pero fue más de lo esperado. Además, los volúmenes disminuyeron. Revisamos la inversión y la empresa: seguimos satisfechos con nuestra posición y creemos que la parada en el precio de la acción fue una sobre reacción del mercado”.
En lo que respecta a Pandora, la principal preocupación es que el crecimiento en China es mucho más lento de lo que esperaban. “Esto se debe a un gran aumento en las ventas en el mercado gris y actividades de marketing inadecuadas por parte de la empresa. Además, el mercado de los Estados Unidos sigue causando problemas y no nos gusta la gestión. Es un poco pobre. Las acciones están bajo revisión y hemos vendido algunas de nuestras posiciones”.
En general, el gestor ha sido un poco más activo de lo normal dado el entorno actual, vendiendo algunas de sus posiciones en small caps y añadiendo otras en el sector salud. Además, ha aumentado su posición en efectivo hasta el 6%, manteniendo todavía en cartera puts sobre el S&P. “El fondo se ha estado comportando de un modo defensivo (beta según Morningstar del 0,82). En nuestra opinión, vamos a seguir viendo volatilidad en el mercado y estamos confiados en el posicionamiento actual”, concluye Vinke.