¿Han tocado fondo las materias primas? BlackRock responde

Koesterich
Foto cedida

Ni renta fija, ni renta variable: las materias primas son definitivamente la clase de activo con peor comportamiento en 2015. Muchas de ellas han tocado mínimos de varios años, como ha sido el caso por ejemplo del oro o de metales de uso industrial como el cobre. De hecho, el índice de Bloomberg que mide la evolución de las materias primas, la cotización del Bloomberg Commodity Index – que sufrió un espectacular desplome este verano- revela que ahora esta clase de activo cotiza un 50% por debajo de su máximo de 2011. Ahora bien, lo que interesa a todo el mundo es saber si ya han caído lo suficiente los precios como para volver a comprar, o si en cambio este activo aún no ha tocado suelo. Ésta es también el punto de partida de Russ Koesterich, estratega jefe de BlacRock. No obstante, este considera que “probablemente todavía es demasiado pronto para hablar de un suelo”. 

La razón por la que el experto recomienda mantener prudencia es porque los últimos shocks en los precios se han producido tanto del lado de la oferta como de la demanda. En el caso de la demanda, indica que la culpa ha sido de la ralentización del crecimiento global, especialmente por parte de las economías emergentes que hasta ahora habían realizado un uso intensivo de las commodities. “Un crecimiento global más lento ha sido asociado también con una caída severa de las expectativas de inflación. Dado que las materias primas son vistas como una protección contra la inflación, esta caída ha llevado a un colapso en la demanda inversora”, asevera Koesterich. Se ha de tener igualmente en cuenta el influjo negativo de un dólar fuerte, “una tendencia que es probable que continúe dadas las tendencias globales de largo plazo como las políticas monetarias divergentes”. Koesterich recuerda que “los mercados alcistas del dólar duran típicamente entre seis y siete años”.

En cuanto a la parte de la oferta, está claro que las materias ligadas a la energía han sido las peor paradas. Koesterich observa que se ha producido una reducción de más del 50% en los pozos de extracción en EE.UU.,  pero que la producción doméstica de petróleo apenas ha empezado a ralentizarse. “Al mejorar la eficiencia de los productores de petróleo bituminoso, la producción ha subido. Hoy, EE.UU. produce cerca de 300.000 barriles al día más que hace un año. Al mismo tiempo, siguiendo al acuerdo nuclear con Irán, muchos estados del Golfo están aumentando su propia producción, en lo que parece ser un esfuerzo algo desesperado por mantener cuota de mercado”, resume el estratega. 

Éste recuerda, para terminar, que “la situación de la oferta y la demanda puede cambiar rápidamente, particularmente para el petróleo, y los precios más bajos están teniendo impacto sobre la demanda”. Dicho esto, considera que “es probable que muchos de los factores que han puesto bajo presión a los precios de las materias primas sigan actuando en lo que queda de este año”. Por tanto, aclara, no espera “un repunte inminente, o fuerte, de los precios este año”. Por ejemplo, señala que el petróleo debería estabilizarse en los niveles actuales, “pero es difícil imaginar una fuerte recuperación en ausencia de una reducción fuerte de la producción no estadounidense”. 

La reflexión de Koesterich sobre las ideas de inversión que plantea la situación actual es que “los productores de materias primas son una oportunidad más interesante que las materias primas físicas”. Indica que, para aquellos que inviertan con un horizonte de largo plazo, de tres a cinco años, “están empezando a emerger algunas gangas”, aunque eso sí, aconseja ser selectivos para evitar trampas de valor.

“Aunque muchos sectores relacionados con las commodities están baratos, la caída de las valoraciones tiende a dar pistas sobre la reducción de los fundamentales, como la caída de los beneficios y la rentabilidad. Esto sugiere que los precios de las commodities pueden caer todavía más o, alternativamente, que los fundamentales necesitan empezar a mejorar, antes de que las compañías vinculadas a materias primas se conviertan en gangas genuinas”. Entre los segmentos donde el estratega ve valoraciones relativamente atractivas – todas en EE.UU.- están las compañías prospectoras, las refinerías y las mineras.