¿Hay que seguir en emergentes?

Peki_CC_81n
Loic Pinseel, Flickr creative Commons

La corrección de los mercados emergentes ha sembrado una duda entre inversores y gestores: ¿mantener, vender o aprovechar para comprar más barato? La opinión de las gestoras internacionales se inclina más por la tercera opción, pero aplicando una buena dosis de cautela; al fin y al cabo, como apuntan los expertos de Franklin Templeton Investments en su último informe trimestral, se han registrado “una considerable salida de liquidez” de los mercados en acciones, bonos, fondos y ETF.  “Las recientes ventas masivas de acciones de países emergentes se está traduciendo en valoraciones más atractivas, tanto en términos relativos como absolutos y una recuperación desde niveles actuales es posible como resultado” de este abaratamiento, apunta en su última carta mensual a sus clientes Giordano Lombardo, director de inversiones de Pioneer Investments

Una opinión que corrobora Matthew Vaight, gestor del M&G Global Emerging Markets, de M&G Investments: “Las valoraciones de la renta variable emergente son ahora convincentes. Basándose en el valor en libros, las acciones emergentes están cotizando actualmente en torno a su nivel más bajo en muchos años, y están más baratas que las de mercados desarrollados en un 25%”. También considera que las compañías emergentes están cotizando con descuento si se toman como referencia sus ROEs. 

En su misiva, Lombardo plantea el siguiente dilema: “La principal cuestión, sin embargo, es si la tasa de crecimiento más lenta de lo esperado de los países emergentes está totalmente reflejada en los precios, porque de otra manera deberíamos esperar una infraponderación mayor de valores emergentes y bonos”. 

Dado este escenario, son dos las posturas que se pueden tomar. La de Pioneer es conservadora: Lombardo avisa a sus clientes de que prefieren infraponderar renta fija emergente, que considera sobrevalorada, especialmente en relación con la baja prima de riesgo que presenta el riesgo, pero estima que le gustarían algunas oportunidades en renta variable, en concreto “historias selectas con valoraciones atractivas”. En cambio, la postura de M&G es 'contrarian', con sesgo valor. En su búsqueda de inversiones potenciales en áreas menos favoritas o que han infraponderado el mercado, se está fijando en compañías cíclicas de sectores que han caído en desgracia, como la minera Vale o la petrolera Petrobras, ambas brasileñas, así como la petrolera rusa Lukoil o Barloworld, una compañía sudafricana que distribuye equipamiento fabricado por Caterpillar.

China, la que más asusta

En este contexto, el principal desafío es la economía china, con su riesgo de aterrizaje brusco. Desde Franklin Templeton alertan de riesgo de 'credit crunch' en el país – como se vio el pasado junio con el espectacular repunte de la tasa diaria del Shibor- y subrayan el hecho de que “las autoridades chinas parecen estar dispuestas a sacrificar algo de crecimiento de corto plazo en interés de asegurar mayor crecimiento de largo plazo”. El gestor de M&G completa esta afirmación: “El desafío en sitios como China o Rusia está en encontrar compañías que están bien gestionadas y crean valor para sus accionistas”.