Japón tiene un ratio de deuda sobre PIB muy elevado (+200%). Y a su vez, presenta unos niveles muy bajos de rendimiento nominal de la deuda pública. ¿Qué lecciones puede aprender la Eurozona de la política monetaria japonesa de los últimos 15 años?
El ratio de deuda japonesa es estructuralmente enorme
Fuente: Thomson Datastream, ING IM (2002 – 2011l)
Anticipo de caída de precios y ausencia de crecimiento de ingresos nominales significativos.
En Japón, el sector privado invierte muy poco y ahorra demasiado. En principio, un periodo de infrautilización de recursos causa que los precios, y finalmente también la inflación salarial sean negativos. En sí mismo, este factor podría ayudar a estrechar la brecha de producción, siempre y cuando los consumidores y las empresas den por hecho que el nivel de precios subirá en el futuro. Sin embargo, este mecanismo puede venirse en contra si tanto consumidores como empresas, esperan que el nivel de precios y salarios caerá en el futuro. En este caso, las expectativas inflacionistas se presentan persistentemente negativas, y por tanto, la economía caería en deflación: el anticipo de caída de precios y ausencia de crecimiento de ingresos nominales significativos se convertiría en una realidad. Esto es lo que ha sucedido en Japón.
¿Existe alguna terapia efectiva para esta enfermedad económica?
Unas buenas medidas monetarias podrían romper esta espiral deflacionaria y curar al paciente. La razón por la que Japón no consiguió romper dicha espiral es porque reaccionó poco y tarde, especialmente en lo referente a políticas monetarias.
Desde el 2008, el Banco de Japón expandió su balance, pero sólo en un 20-25%. Esto es insignificante en comparación el 200% implementado por la FED y el Banco de Inglaterra. En este sentido, la última decisión del Banco de Japón de ampliar su programa de compra de activos de 10 billones de yenes a 65 billones de yenes no cambiará mucho la psicología deflacionaria. En nuestra opinión, lo mismo puede decirse ahora, por el hecho de que el Banco de Japón haya anunciado un objetivo de inflación de un punto medio del 1%. Establecer un objetivo es una cosa, pero aplicar las herramientas para alcanzarlo es otra. Principio del formulario
¿Qué puede sacar la Eurozona en claro de Japón?
Como en Japón, en los países periféricos de la Eurozona, podría surgir una disminución estructural de los precios si los consumidores y las empresas tienen miedo al futuro y se concentran en el ahorro (como lo hacen las empresas en Japón). En este caso, no habría recuperación del crecimiento económico y los ingresos fiscales seguirían siendo decepcionantes. De ser así, la deuda sólo aumentaría. Por lo tanto, un programa que se concentra sólo en el ahorro no funciona. Aparte de los ahorros, los países periféricos necesitan un "plan Marshall" para reducir su deuda con éxito y reformar sus economías. Dicho esto, los países periféricos de la Eurozona tienen que evitar por todos los medios caer en la espiral deflacionaria en la que se ha posicionado Japón.
El sector privado de Japón financia su propia deuda
La principal diferencia entre los países periféricos y Japón es que éste último puede financiar su propia deuda fácilmente. La razón principal es que más del 90% de la deuda del gobierno japonés está en manos de sus propios ciudadanos y empresas. Ponen sus ahorros en manos de los bonos de gobierno y no tienen la menor duda que el gobierno pagará sus deudas. Otra gran ventaja de Japón frente a países periféricos de la Eurozona, es que Japón emite su propia deuda en su propia divisa. Por este motivo, Japón puede prevenir que una posible crisis de liquidez se transforme en un problema de solvencia.
Se desconoce en qué momento el nivel de deuda japonesa puede hacerse insostenible
En nuestra opinión, habrá un cierto nivel de deuda sobre PIB en el sector privado japonés que considere que la deuda se ha vuelto insostenible. Sin embargo, no se sabe en qué nivel de deuda éste será el caso. A medida que la crisis de la deuda de la Eurozona va tomando ejemplo, sería mucho mejor para todos evitar este punto, animando el crecimiento de la demanda interna (en lugar del crecimiento de la deuda pública). La historia nos muestra que acelerar el crecimiento de la demanda interna puede ser difícil para Japón, pero no imposible.
Puedes leer el informe completo en inglés en el documento adjunto.