Según Robert Van Kleeck, responsable de gestión de carteras de crédito de Assenagon AM, los bonos siguen siendo la clase de activos del momento. La atención se centra en estos dos por su atractiva relación rentabilidad-riesgo.
La renta fija sigue siendo una de las clases de activos más atractivas del momento. Así lo afirma Robert Van Kleeck, responsable de gestión de carteras de crédito de Assenagon Asset Management, una gestora alemana en plena expansión cuya plataforma de renta fija gestiona activos por valor de 1.500 millones de euros. En concreto, el experto ve oportunidades en dos segmentos: el crédito y los bonos CoCo. A pesar del escenario incierto por el aumento de los riesgos geopolíticos y los recortes de los tipos de interés, los rendimientos en crédito son muy atractivos para Van Kleeck.
"Es un momento interesante para invertir en renta fija. Llevo en los mercados desde 2009, y desde entonces nunca ha habido una situación tan positiva para esta clase de activos", afirma Van Kleeck al ser entrevistado por FundsPeople. “En el pasado reciente, con los tipos mantenidos a cero por los bancos centrales, los inversores se veían obligados a apostar por el High Yield o por emisiones de menor calificación para obtener rentabilidad. Pero hoy es diferente”, afirma el gestor.
De hecho, según su análisis, aunque los diferenciales se han estrechado mucho últimamente, los rendimientos ofrecidos permiten invertir en deuda emitida por empresas de calidad sin asumir un riesgo adicional. “Nos centramos en las partes del mercado en las que te recompensan mejor los riesgos adicionales que asumes”, afirma el experto. “Hay segmentos en los que no te recompensan suficientemente por el riesgo en estos momentos, ante la incertidumbre macro: es el caso del high yield, por ejemplo”, explica el gestor. En cambio, el grado de inversión parece muy atractivo para el gestor, debido a los atractivos rendimientos incluso en emisiones de calidad, cuyas valoraciones se ven respaldadas por las perspectivas de un aterrizaje suave y una relajación de los tipos de interés.
Más allá de los imprevisibles sobresaltos que puedan provenir de la geopolítica, los mercados disfrutan de una coyuntura favorable, impulsados por la resistencia de la economía estadounidense. Pero los signos de debilidad del crecimiento estadounidense podrían generar turbulencias en los mercados y socavar este escenario positivo. «Sin embargo, hasta la fecha, el crecimiento estadounidense sigue mostrándose sólido: la inflación parece bajo control y los datos positivos de consumo y empleo confirman el escenario de aterrizaje suave», afirma el gestor de Assenagon AM. ¿Qué podría salir mal? “Es difícil hacer predicciones: las nuevas crisis nunca son iguales a las anteriores”, argumenta el profesional.
El potencial del CoCo
Además del crédito, la otra clase de activos en la que hay que centrarse según Van Kleeck es el nicho de los bonos CoCo emitidos por bancos, aseguradoras y otras instituciones financieras. La razón: una vez más, los rendimientos y la rentabilidad de este segmento, en el contexto de un sector bancario saneado que ha hecho grandes progresos en los últimos 10-15 años para fortalecer sus balances. Pero el mercado de CoCo aún guarda el mal recuerdo de la quita de bonos AT1 de Credit Suisse durante el rescate y la absorción por parte de UBS en marzo de 2023.
Pero según Van Kleeck, este acontecimiento extraordinario, que tuvo lugar hace ahora más de un año y medio, debe interpretarse desde una perspectiva diferente: efectivamente fue un momento difícil, pero el segmento consiguió absorber la quiebra de un gigante bancario como Credit Suisse, entre otros uno de los mayores emisores de CoCo del mundo, sin contagio ni crisis del sector. Un acontecimiento que no hay que subestimar y que habla una vez más de los avances en materia de estabilidad bancaria.
“La conversión a cero de los AT1 de Credit Suisse provocó inicialmente un descenso en el mercado de bonos CoCo, pero desde entonces el índice ICE BofA CoCo se ha recuperado con fuerza”, afirma Van Kleeck. “Además, se trató de un caso aislado: una decisión del regulador suizo de los mercados financieros, que por tanto no tiene nada que ver con la zona euro, el mercado de CoCo en el que invertimos predominantemente”.
Y a todo esto, según Van Kleeck, hay que añadir la fuerza de las emisiones primarias: “En los cuatro primeros meses del año, los bancos europeos emitieron más de 11.000 millones de euros brutos de deuda adicional de nivel 1, lo que, comparado con el mismo periodo de los últimos cinco años, representa la segunda mayor cantidad de AT1 emitida en el mercado, sólo por detrás de 2023, cuando se emitieron más de 13.000 millones de euros”, afirma. “El saldo vivo total de AT1 en euros, dólares y libras esterlinas ronda los 190.000 millones de euros. Se espera que la oferta total para el año sea de unos 25.000-30.000 millones de euros”, concluye el experto.