Iturriaga, Espelosín y Prats: selección de compañías europeas en la (estéril) era Trump

europe
swishphotos, Flickr, Creative Commons

Nunca antes los tres gestores de autor de Abante Asesores Gestión (José Ramón Iturriaga, Alberto Espelosín y Josep Prats) habían coincidido en un mismo evento público emitiendo su opinión sobre la evolución de los mercados. Y por eso cobra mayor importancia que la primera vez que lo hayan hecho haya sido tras la victoria electoral de Donald Trump, que le aúpa como nuevo presidente de los Estados Unidos.

Lo cierto es que, gracias a su universo y filosofía de inversión -selección de compañías europeas y españolas en base a sus fundamentales, más un análisis macro en el caso de Espelosín como aproximación de riesgo-, la toma de control de Trump no debería incidir demasiado sobre la composición de las carteras de sus fondos. Poco después de su victoria, “el mercado vuelve a recuperar cordura, la reacción ha sido mejor de lo que se esperaba”, considera Iturriaga (Okavango Delta, Kalahari y Spanish Opportunities).

Según Prats (European Quality), hay macrotendencias que el mercado y los gestores no pueden obviar y que van más allá de eventos inesperados como el Brexit o la elección de Trump en EE.UU., entre ellas la globalización, la digitalización, los tipos bajos de interés, el gran consumo, el lujo y el envejecimiento de la población, las cuales juega en su fondo. En general, afirma Espelosín (Pangea), “existe una distorsión importante entre unos sectores y otros, pero la multinacional clásica sigue funcionando bien”. Respecto a Trump, Prats está convencido de que “la libertad de comercio no tiene vuelta atrás” y de que, “de sus promesas de combatir el libre comercio y la inmigración, hará poco de lo primero y sí de lo segundo”.

Según estos profesionales, la multinacional europea clásica vende entre el 30% y el 40% de sus productos y servicios en Europa, dentro de sus fronteras, por un tercio que exporta a Asia y otro tercio a Latinoamérica. Para seleccionar compañías, valoran especialmente su alto crecimiento o su bajo precio. Del primer lado se sitúan las automovilísticas alemanas, que “ya venden más en los mercados emergentes que en su mercado local”. Del otro lado caen los bancos europeos, dado que, “aunque su crecimiento no va a ser alto, su punto de partida en valoración es muy bajo”, contrapesa Prats. Traducido en nombres de compañías, algunas de las ideas de valor que maneja Espelosín en la actualidad son EON, K+S, C&C, Nokia, Telecom Italia o Telekom Austria.

El positivo rumbo de España

Particularmente, en lo que respecta a España, Iturriaga se muestra optimista, tanto por la renovada fortaleza de la economía como por las valoraciones “muy baratas” de su parqué, lo que le deja un amplio campo de actuación. “Estamos creciendo de una forma más sana que antes, y lo que es más notable, el sector de la construcción no ha tenido que ver”, recuerda. No obstante, considera importante que el sector de la construcción, especialmente el residencial, vuelva a coger ritmo, “pero más importante aún es que no dependamos en exclusiva de él”, advierte. En su fondo, casi el 60% de la cartera lo componen bancos (por encima del 30%) y construcción e inmobiliario (más del 25%). Dentro del sector bancario nacional, prevé que “Popular puede ser el próximo participante de la consolidación del sector financiero, eso sí, como consolidado”.