La CNMV alerta de influencers que no cumplen con los requisitos para realizar recomendaciones de inversión

Lupa
Foto: Markus Winkler, Unsplash

La CNMV ha publicado un comunicado en el que avisa que después de realizar una revisión de las actividades en redes sociales de influencers en el sector financiero, ha observado que algunos de ellos podrían estar emitiendo recomendaciones de inversión sin cumplir con los requisitos establecidos por el régimen de la Unión Europea (UE).

El organismo supervisor ha tomado va a tomar medidas. En concreto, va a contactar con las personas inicialmente identificadas por la CNMV como "expertos" para solicitarles aclaraciones sobre su actividad. La actividad de elaboración y difusión de estas recomendaciones está regulada en el Reglamento UE 596/2014 sobre el abuso de mercado y en el Reglamento Delegado (UE) 2016/958 que lo desarrolla. Con esta actuación de supervisión, la CNMV pretende promover el cumplimiento de los objetivos de la legislación. Esto es, que quienes hagan recomendaciones de inversión se identifiquen adecuadamente, presenten las recomendaciones de manera objetiva y revelen todas las relaciones o circunstancias que pudieran afectar a su objetividad. Y de esta manera busca asegurar una igualdad de trato con las personas y entidades supervisadas que emiten sus recomendaciones respetando los requisitos normativos.

El organismo aprovecha el comunicado para recordar que una recomendación de inversión consiste en una información en la que se recomiende o sugiera una estrategia de inversión, de forma explícita o implícita, en relación con uno o varios instrumentos financieros o con los emisores, incluida toda opinión sobre el valor o precio actuales o futuros de esos instrumentos, destinada a los canales de distribución o al público.

Qué es una recomendación de inversión

Para determinar si se emite una recomendación es necesario analizar la sustancia de lo que se comunica, es decir, si se recomienda una estrategia de inversión (comprar, mantener o vender instrumentos financieros), con independencia del nombre que se dé a la comunicación, su formato o el medio a través del que se difunde (puede ser por vía electrónica o verbal, por ejemplo). Así, para que una información constituya una recomendación no es necesario que se presente por escrito o que se denomine como tal.

Habitualmente, las recomendaciones de inversión son emitidas por empresas de servicios de inversión o entidades de crédito que se dedican a esta actividad y  que están supervisadas por la CNMV, también pueden ser elaboradas y divulgadas por otras personas, que están sujetas a ciertos requisitos mínimos. Cuando estas otras personas se presentan al público en general como poseedores de experiencia o conocimientos sobre instrumentos financieros y los mercados, o son percibidos como tales por los participantes del mercado, la regulación les califica como ‘expertos’ y les sujeta a requisitos adicionales.

Además, recuerda, que aunque estos expertos pueden pensar erróneamente que el régimen de la UE sobre recomendaciones de inversión no les aplica por el hecho de transmitir sus comunicaciones a través de redes sociales o de forma verbal, existe una Declaración de ESMA en materia de recomendaciones de inversión en redes sociales en la que se explicaba qué actividad está sujeta a la regulación y las normas aplicables como se puede consultar aquí.