La CNMV avisa: vigilará las prácticas de comercialización que se hagan en fondos de deuda y en productos alternativos para minoristas

Lupa
Foto: Markus Winkler, Unsplash

El cambio de contexto hacia uno de mayores inflaciones y alzas de tipos de interés ha llevado a las gestoras de fondos a poner en un sitio privilegiado de sus escaparates los fondos de renta fija. Así lo han recordado en el XII Encuentro Nacional de la Inversión Colectivo, celebrado en Madrid y organizado por Apd, Inverco y Deloitte.

En esta cita anual, que es todo un clásico para la industria, se ha cifrado en 11.500 los millones de euros que han entrado en dinero en productos que tienen en la renta fija como su principal inversión. Una avalancha de dinero que se produce en un contexto que puede generar mucha incertidumbre, al menos a corto plazo ,teniendo en cuenta que se prevén más alzas de tipos por parte de los bancos centrales y que aún se desconoce si la inflación ha tocado techo.

Es por ello que una de las dos áreas de mayor supervisión que se marca la CNMV para los próximos meses afecta precisamente a la renta fija y ,más concretamente, a la comercialización de los fondos que invierten en estos activos. "En 2022 está habido aportaciones netas a los fondos sobre todo a renta fija, que han captado 11.500 millones, sobre todo a fondos de baja duración, buy and hold y a gestión discrecional. Esto implica que hay que enfatizar en la adecuada comercialización porque el contexto es de alzas de tipos de interés y porque los inversores tienen que ser conscientes de los riesgos que tiene invertir en este contexto de inflación y tipos al alza", explicó José María Marcos, director general de entidades de la CNMV.

Alternativos, mejor en un contexto de asesoramiento

No es, sin embargo, la renta fija, el único tipo de activos que va a concentrar sus labores de supervisión. También destacó otra gran preocupación debido a la reciente aprobación de la Ley Crea y Crece que, entre otras cosas, reduce a 10.000 euros la inversión mínima en fondos de capital riesgo, y también a la cada vez mayor tendencia de democratizar las inversiones alternativas ilíquidas hacia inversores minoristas. "Nos centraremos en la supervisión de las entidades que ofrecen los vehículos de inversión alternativa cerrada a minoristas", afirmó Marcos. Y añadió que sobre todo lo harán cuando la comercializadora es la propia gestora.

Eso sí, puntualizó que creen que "puede ser positiva pero ha de hacerse con garantías de protección al inversor, que debe estar informado del riesgo, costes, iliquidez, y fiabilidad de las valoraciones alternativas hasta vencimiento son diferentes". De ahí que bajo su punto de vista, "lo ideal sería que ese tipo de comercialización se haga preferentemente en el ámbito de asesoramiento y limitando la exposición del cliente a este tipo de vehículos”.

Los retos regulatorios

En cuanto a los retos a los que se enfrenta un sector como el de gestión de activos que ha resultado ser muy resilente, Marcos destacó dos ligados a cambios regulatorios. Uno de ellos es el que afecta a la sostenibilidad (la conocida como Green MiFID) y el otro es la entrada en vigor de PRIPS, que obliga hacer a las gestoras a hacer un nuevo documento de datos fundamentales para el inversor.  Pidió por ello "planificación adecuada" para las gestoras, ya que se enfrentarán no solo a la puesta en marcha de un anexo de sostenibilidad de sus productos sino también a la elaboración de un nuevo documento de información al inversor (DFI) que, a diferencia de lo que sucedía en el pasado, tendrá que ser un nuevo documento elaborado por las gestoras ya que no podrá crearse a partir del folleto registrado en CNMV.