FundsPeople entrevista en exclusiva a Borja Uriarte y Pedro Sagüés, Managing Directors de Inversiones Alternativas en Bankinter Investment SGEIC, la sociedad gestora de activos alternativos, filial del banco, para conocer cuáles son las características de su inversión en activos alternativos.
La gestora de activos privados, Bankinter Investment, fue registrada en CNMV en enero de 2023. Una historia reciente que, sin embargo, acumula siete años de experiencia en la inversión en estos mercados. Durante este periodo, los clientes de Bankinter han comprometido 4.500 millones de euros en 21 fondos.
El último de ellos, el Bankinter Investment Inversión Alternativa 1, supone una apuesta en firme por hacer accesible los activos reales al inversor retail. Se trata de un fondo de fondos que, con una inversión mínima de 10.000 euros, permite invertir en una cartera diversificada de fondos de activos alternativos de la entidad.
Al frente de la inversión alternativa en Bankinter Investment están Borja Uriarte y Pedro Sagüés, Managing Directors de Inversiones Alternativas. Preguntados en qué se diferencia la estrategia de Bankinter en mercados privados de otros competidores, señalan tres razones. La primera, el alineamiento de todo el banco que empieza a nivel directivo y desciende al resto de eslabones que hay en el banco. En segundo lugar, “por cómo es Bankinter”, explica Uriarte, “una entidad que está acostumbrado a ser rupturista e innovadora”. La tercera razón es el propio modelo de negocio que sigue la plataforma de inversión alternativa, cuando lanzan un fondo lo hacen con socios industriales expertos en los sectores en la temática de inversión (energías renovables, residencias de estudiantes, sector hotelero, sector inmologístico, infraestructuras, superficies comerciales, etc.).
Además, el banco es el inversor ancla en todas las operaciones que hacen. Según Uriarte, “evidencia que ponemos el dinero donde ponemos el consejo a nuestros clientes. Somos los primeros en creernos lo que estamos haciendo”, explica.
Bankinter no comercializa productos de terceros, sino que estructura sus propios vehículos. Consideran que es ahí donde pueden aportar valor. “Queremos saber en todo momento si un hotel no funciona cuál es la razón ya que hemos participado en el análisis del modelo de negocio”, señala Uriarte.
"No comercializamos productos de terceros, estructuramos nuestros propios vehículos"
La gestora busca dónde invertir, con quién invertir y se apalancan en la capacidad de distribución del banco. “Tenemos el papel intermedio entre el gestor de negocio y el inversor, asegurando la alineación de intereses”, añade Sagüés. El proceso de estructuración de un fondo comienza por elegir la idea adecuada y los mejores socios industriales para articularla, a quienes “les exigimos, fundamentalmente, conocimiento del sector, reputación y que haya pasado por distintos ciclos del mercado, además de inversión, asegurando una correcta alineación de intereses”.
Añade Uriarte que es muy importante que estos socios se sientan partícipes del proyecto creado por Bankinter, “que tengan orgullo de pertenencia a esta plataforma”. A lo largo de estos siete años, cifra en más de 300 los activos en los que han invertido y para ello han tenido que valorar más de 1.000 oportunidades entre los socios y ellos.
Además del equipo de 30 personas que hay en Bankinter Investment (entre la gestora y el área de banca de inversión que da soporte puntual), se apalancan en todas las capacidades del banco para generar ideas de inversión, analizar los riesgos, así como tendencias de mercado. “En ese sentido todo el banco está alineado para prestar sus capacidades al servicio de estas inversiones a los clientes”, explica Uriarte. “En nuestra estrategia cada pieza por si sola es muy importante, pero el engranaje es diferencial”, afirma.
Universalización de los mercados privados: un nuevo mundo
A lo largo de los últimos siete años, Bankinter ha lanzado productos de una estrategia en el que los clientes iban invirtiendo con ellos. “El cliente decidía en qué fondo quería entrar. Vamos a mantener esta estrategia lanzando producto para los clientes que quieran coinvertir con nosotros, pero al mismo tiempo abrimos un nuevo mundo, el del inversor minorista, lanzando fondos de fondos de gestión delegada donde será la nueva gestora la que vaya decidiendo los vehículos subyacentes en los que ir invirtiendo, velando por una adecuada diversificación entre los vehículos de inversión alternativa del banco que son los que conocemos al 100%”, explica Uriarte.
Buscan democratizar la inversión en mercados privados para el minorista, dando acceso a todas las familias, creando una cultura de ahorro financiero diversificado a largo plazo, con una estrategia de cliente no de producto. Lo anterior es posible tras el cambio normativo que permite la estructuración de vehículos a partir de una inversión mínima de 10.000 euros.
Explica Uriarte que, aunque esta es una industria que en la península ibérica parece muy nueva, si nos fijamos en otros mercados la penetración de estos activos en la base del ahorro es más elevada. “El motivo es que los fondos de pensiones que en otros países aglutinan una parte notable del ahorro de las familias, han visto en los activos privados un factor de estabilidad de los retornos a largo plazo”, explica. “De ahí que nosotros queramos convertirnos en el fondo de pensiones de la economía española”. Señalan que en España esta industria está como la de fondos de inversión en los años 90. “En 10-15 años hablaremos de activos alternativos con la misma naturalidad que hoy hablamos de fondos de inversión”, añade.
Coyuntura más compleja
Según Sagüés, la industria ha experimentado un crecimiento enorme en los últimos años gracias, entre otras cosas, a la bajada de tipos. Unos años de dinero barato relativamente fácil de invertir. “El reto ahora es, en un entorno diferente, tener las capacidades para invertir y rentabilizar ese dinero batiendo la inflación más allá de los productos habituales”, señala. Con la subida de tipos no puedes beneficiar las inversiones vía apalancamiento, tienes que comprar activos que sean rentables por sí. Esto hace que el proceso de inversión sea mucho más exigente pero también mitiga mucho el riesgo financiero”, añade.
"Es el momento de demostrar que los activos alternativos ofrecen valor en el largo plazo"
Para ello defienden que hay que conseguir crear valor invirtiendo de verdad. Una realidad que lejos de ser un problema, “va a contribuir a desarrollar más aún la industria”, explica Sagüés. “Hasta ahora muchas entidades lo que habían hecho era aliarse con otras gestoras para distribuir producto. Desde el punto de vista de inversión no había alternativa. Ahora sí la hay, por lo que es el momento de demostrar que los activos alternativos ofrecen valor en el largo plazo, y para ello necesitas equipos profesionales que sepan invertir en el nuevo entorno”.
Sin embargo, en el nuevo mercado minorista que buscan desarrollar, no es suficiente “un equipo que sepa invertir, sino que ha de tener las capacidades tecnológicas para poder dar acceso a los clientes”, señala Pedro Sagüés. “No es lo mismo gestionar un fondo con 20 clientes que con 2000.
Más allá del entorno o el desarrollo de una tecnología adecuada, uno de los retos más importantes para la comercialización de estos productos es “el colectivo nuevo que queremos que se incorpore”, explica Uriarte. “Estamos muy acostumbrados a trabajar con institucionales y con la parte alta de la banca privada. Pero este es un camino nuevo, y debemos ayudar al banco y a los clientes a construir la curva de aprendizaje. El conocimiento construido en estos siete años ha de ponerse a disposición de nuevos equipos comerciales y una base de clientes más amplia de lo que ha sido hasta ahora. Siendo pioneros, somos conscientes de que hay más ojos mirando, por lo que el riesgo reputacional es mayor”, añade.
“Aspiramos a que se universalice la inversión en mercados privados”
Esto lleva a reforzar ciertos eslabones de la cadena, empezando por el proceso de identificación de los clientes (por patrimonio, nivel de conocimientos, etc.) y terminando en los procesos de seguimiento de las inversiones y de los inversores para asegurarnos que los clientes no estén sobreexpuestos y que tienen la cartera adecuada a su perfil de riesgo. Además, han de adaptar los protocolos de comercialización, el conocimiento que se exige a la red de banqueros, los protocolos de formalización de contratos, tratando no solo de aplicar un lenguaje más amigable, sino que exista una total transparencia en la información que se pone a disposición de los clientes.
“Aspiramos a que se universalice la inversión en mercados privados”, concluye Uriarte. “Va a llegar, y a nosotros nos va a pillar con todo este historial y bagaje ya en la mochila. Y no podemos olvidar algo muy importante: invirtiendo en activos reales no solo se busca optimizar el binomio rentabilidad-riesgo sino una contribución al desarrollo de múltiples sectores y a la generación de empleo a largo plazo. Estamos demostrando que se puede invertir de manera rentable al mismo tiempo que se genera un valor a la sociedad perdurable en el tiempo”.