La evolución del sistema de pensiones costarricenses

Sin embargo los ajustes, son necesarios en respuesta a la sostenibilidad de los sistemas en el mediano y largo plazo; no por impopulares dejan de ser necesarios.

La capacidad de comunicar la necesidad de los cambios es un área critica que, sumada a la crisis, despierta retos e impone la necesidad de implementar las acciones en el corto plazo, pues querámoslo o no, la realidad es necia en demostrar la urgencia de tomar acciones en circunstancias que afectan los niveles de empleo, la productividad de los factores y consecuentemente el crecimiento de las economías.

Las tendencias demográficas de las sociedades maduras y las burbujas de los mercados financieros crearon las condiciones en donde, los ajustes, se hicieran impostergables y, a pesar de la erosión de las relaciones, tanto los trabajadores, como los empresarios y los gobiernos tuvieran que realizar nuevos consensos.

Como un hecho interesante, las reformas de los sistemas de pensiones costarricenses, podrían narrarse en diferentes etapas, sin que por ello podamos suponer que se encuentran finalizadas. Algunas con confrontación social, como la generada por el régimen del Magisterio Nacional, en 1995 y otras, dentro del marco de la concertación como la creación de los sistemas complementarios de capitalización individual, desde el año 2000.

El sistema de Pensiones costarricense es multipilar . Esto permite administrar y mitigar los riesgos sociales y financieros.

Para efecto de ubicar al lector, me permito hacer una breve descripción de este sistema, el cual se compones de un pilar básico y general administrado por la Seguridad Social que se complemento con dos sistemas de capitalización individual administrado tanto por el sector financiero público como privado.

Las razones de modificar el sistema obedecieron a los cambios de la estructura demográfica y madurez del sistema de reparto que, en general, restaron viabilidad y sostenibilidad al sistema general y sus substitutos.

Se plantearon otros objetivos en la reforma procurando resolver los riesgos morales, ya que un sistema de capitalización complementario de cuenta individual planteo una alternativa para subsanar problemas como la morosidad, la evasión, la subdeclaracion de salarios provocados por la débil relación entre aportes y beneficios, así como también diversificar los riesgos y atenuar los costos de transición que son particularmente altos en países con regímenes de reparto de amplia cobertura. Para Costa Rica, esto significa que en la actualidad, los regímenes básicos de pensiones cubren en conjunto cerca del 59% de la PEA y mantienen un ratio de soporte al 2011 se 7.4; es decir que por cada pensionado, cotizan 7.4 asalariados

El segundo pilar llamado Régimen Obligatorio de Pensiones Complementarias, es de capitalización individual, y es administrado por empresas, denominadas Operadoras de Pensiones a las cuales deben afiliarse obligatoriamente todos los trabajadores asalariados del país, pero con libertad de elección.

A este hay que sumar el Régimen Voluntario, el cual goza de beneficios fiscales para estimular el ahorro para la jubilación.

Producto de las reformas, las reservas administradas son equivalentes al 26,5% de la producción nacional a finales del 2011

Con estas medidas, se crearon las condiciones y las sinergias entre las instituciones de la Seguridad Social y los administradores de fondos, resolviendo viejos problemas de los primeros, creando condiciones favorables para los gestores de fondos con beneficios sociales.