Steven Barry, responsable de inversiones del equipo de renta variable de crecimiento de Goldman Sach
En Goldman Sachs Asset Management aseguran que el mundo ha cambiado y alertan de que las referencias del pasado pueden dejar de ser un indicador válido. “Tenemos una visión fundamental y vemos hacia el futuro, lo que las compañías son capaces de hacer y no lo que han hecho. Esto tiene valor en un momento en el que el pasado puede no ser un buen indicio de lo que traerá el futuro”, afirma Steven Barry, responsable de inversiones del equipo de renta variable de crecimiento de la gestora estadounidense.
Y pensar en el futuro, y sobre todo en crecimiento futuro, añade, implica pensar en los mercados emergentes. “Para entender hacia dónde se mueve el mundo es importante tener equipos de análisis en los mercados locales con más potencial. Por eso tenemos equipos en Sao Paulo, Shanghái, Hong Kong, Corea, Singapur y Mombai. Buscamos empresas bien posicionadas para obtener beneficios de donde vendrá el crecimiento, de países como Brasil, India y China”, afirma.
Barry piensa que los mercados emergentes, aunque experimentarán volatilidad en el corto plazo, seguirán captando dinero y la atención de los inversores de manera creciente en el largo plazo. “Hemos visto flujos de capital importantes hacia la renta variable emergente. Es una fuerza secular. Tenemos una visión clara de que una parte del mundo se volverá más importante para los inversores en renta variable global. Las compañías globales de alta calidad y con una posición dominante serán atractivas sin importar dónde estén. Las compañías emergentes captarán dinero con fuerza”, señala.
Barry comenta que muchas de las compañías que mantienen es sus carteras están orientadas a beneficiarse del crecimiento de las economías emergentes. Y mirando hacia los mercados desarrollados, considera que Estados Unidos ofrece valoraciones atractivas y un gran número de empresas sólidas y con buenas perspectivas. “Si encuentras compañías con capacidad para crecer en este entorno, es que podrán hacerlo en casi cualquier otro contexto”, dice.
El responsable de inversiones del equipo de renta variable de crecimiento de Goldman Sachs Asset Management afirma que las compañías liderarán el crecimiento en Estados Unidos. “No esperamos que el consumidor de Estados Unidos sea un lastre, pero tampoco encabezará la recuperación. Creemos que las compañías serán las que impulsarán el crecimiento y cuando se cree empleo volverán los consumidores. Ver cómo las compañías han respondido a la incertidumbre de 2008 en adelante es algo muy esperanzador”, señala.
Para Barry, la distinción entre valor y crecimiento ha perdido buena parte de su sentido. “Esa diferenciación es hoy menos importante, no sé si volverá a serlo en el futuro cercano. La línea entre crecimiento y valor se ha difuminado. Muchas compañías de crecimiento pueden estar baratas y otras de valor pueden crecer. Hoy, hay muchos valores que se repiten en nuestras carteras de valor y crecimiento. Además, que una compañía haya sido de crecimiento no significa que lo vaya a seguir siendo”, dice.
Barry reconoce que 2010 está siendo un año difícil para los inversores fundamentales. “Esperábamos que éste fuera un año de stock picking, pero las fuerzas macro se han impuesto. Eso sí, creo que en cualquier momento puede cambiar a un entorno dominado por la selección de valores. Llevamos un año y medio esperando el cambio y sólo depende del mercado el dar ese paso”, afirma.
El hecho de que el mercado no discrimine entre buenas y malas compañías y la volatilidad de los últimos meses presentan buenas oportunidades para los inversores pacientes, opina Barry.
“El mercado es muy emocional. Y se mueve dirigido casi en exclusiva por los problemas macro. Un día le gusta todo y al día siguiente le disgusta todo. Si tienes un horizonte de uno a tres años, puedes encontrar buenas oportunidades. Para nosotros, como analistas fundamentales, este enfoque sólo en lo macro genera oportunidades únicas para escoger buenas compañías. Pensamos en la calidad en términos cuantitativos y cualitativos”, explica.
Por sectores, considera que las mejores oportunidades se concentran en tecnología, sanidad, industria, finanzas e infraestructuras. Barry señala que, en su proceso de inversión, se fijan poco en el tracking error. “Pensamos que nuestro análisis aporta valor. Cuando la situación vuelva a la normalidad, la diferencia entre valores importará. Por eso tenemos posiciones activas en valores que nos gustan”, dice.