La reestructuración de las cajas ofrece oportunidades para la banca privada

La reestructuración de las cajas de ahorros en España impone una nueva realidad financiera que muchos tildan de apocalíptica pero que sólo trae consigo cambios. En algunos casos, negativos para las entidades, que ven farragoso el proceso de integración en el caso de las fusiones o que sufren despidos, pero que según los expertos pueden ofrecer interesantes oportunidades para el sector de banca privada en España si sabe jugar bien sus cartas.

 

Para Alfonso Martínez Parras, director general de BNP Paribas Wealth Management, el éxito de la reestructuración de las cajas dependerá de si se produce o no de forma ordenada. En caso negativo, augura que podría haber salida de capitales como ha ocurrido en otros países y que, según comentó el experto en un reciente evento en Madrid sobre banca privada, esta situación podría ser aprovechada por bancos internacionales que intentan ganar en un entorno de riesgo regulatorio y sistémico. Otra consecuencia negativa podría ser la salida de profesionales y la obligada concentración del sector de banca privada. Pero ello revertiría también en un menor número de entidades, un escenario apetitoso para quien supiera mantenerse en pie.

 

“Es un proceso largo pero inmediato en el que las entidades podrán arañar cuota de mercado”, comenta Emilio Andreu desde la entidad luxemburguesa con origen en Andorra Andbanc.

 

También ve oportunidades Borja Lacalle Noriega, director comercial de Banco Urquijo. “Los banqueros piensan en los procesos de integración, en la supervisión… pero también hay oportunidades”, comenta, si bien las supedita al cese de la guerra del pasivo. “Hasta entonces, hay poco que ganar”, explica, pues dicho fin será clave para entrar en otros productos y servicios.

 

“Habrá oportunidades, la posibilidad de que muchos se conviertan en agente o en EAFI al salir de las entidades debería beneficiar al sector”, dice Manuel Sánchez del Valle Alfaro, director general de Banca Privada de Banco Popular. De hecho, el experto está convencido de que el surgimiento de las EAFI está más relacionado con una explosión de la oferta que de la demanda en el servicio de asesoramiento. “Vemos el interés progresivo en clientes más sofisticados, como family offices, y relacionado con su nivel patrimonial, pero no vemos que exista una demanda de asesoramiento independiente”, explica, matizando que lo que sí hay es una demanda de buenos resultados. “Si las bancas privadas tienen éxito en capturar esa necesidad creciente, estarán ahí con las EAFI, pero el gran desafío, hoy por hoy, es dar resultados”.