“La renta variable se puede comportar mejor que la renta fija en los próximos tres meses”

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Ing Jorge -Flicker Creative Commons

Aunque las economías desarrolladas estén dando señales de recuperación, no se confíen. Desde Pictet Asset Management señalan que, pese al mayor crecimiento económico, los indicadores de sentimiento están dando señales de venta, por lo que han optado como estrategia para los próximos tres meses mantenerse neutrales en renta variable. Además, sostienen que a la renta variable le queda poco potencial a corto plazo, pues con el rally de los últimos meses ha realizado gran parte de su recorrido.

Las estimaciones de Pictet apuntan a que el crecimiento de Estados Unidos se puede acelerar, impulsado por las inversiones, hasta alcanzar el 3% anualizado a finales de año, el doble del registrado en el primer semestre. “Un mayor crecimiento conducirá a la Reserva Federal a reducir su programa de compras de activos –puede comenzar en diciembre–, eliminando el principal soporte de los activos de riesgo” resumen en el panorama global de la gestora para el próximo trimestre Olivier Ginguené, estratega jefe de Pictet, y Luca Paolini, director de estrategia de la firma. “Una desaceleración puede desencadenar nuevas revisiones a la baja de beneficios empresariales, repercutiendo negativamente en las acciones”, continúan, para concluir que “la renta variable puede cotizar en banda limitada hasta final del verano”.

Esta decisión tiene matices, no obstante, puesto que pese al escenario expuesto los expertos de la gestora suiza estiman que esta clase de inversión, “se puede comportar mejor que la renta fija los próximos tres meses”. En la gestora optan por mantener un posicionamiento al alza en renta variable estadounidense y a la baja en acciones europeas.

Consideran que en las últimas semanas “se ha moderado el riesgo de retirada de estímulos de su política monetaria de la Reserva Federal”, por lo que las bolsas de Estados Unidos se beneficiarán de “un dólar más fuerte, aceleración económica, beneficios empresariales sólidos y un sector privado en forma tras haber reducido su deuda en mayor proporción que cualquier otro país desarrollado importante”. En consonancia con esta estrategia, desde Pictet se mantienen largos en dólar estadounidense a pesar de la corrección que experimentó la divisa en julio.

Europa y Japón no son tan tentadores

Más conservadora es la visión de Ginguené y Paolini para Europa y Japón. En lo que respecta al Viejo Continente, estiman que lo positivo de los últimos datos macro, aunque sean “signos alentadores” (por ejemplo, el índice de directores de compras ha superado los 50 puntos por primera vez en dos años), sin embargo “no son bastante fuertes para compensar riesgos de tensiones políticas”, con mención especial para las elecciones generales que celebra Alemania en septiembre. Ambos estrategas consideran que un descuento del 15% de la renta variable europea con respecto a la americana “está plenamente justificado” puesto que, en dólares, las acciones europeas han llegado a presentar un comportamiento un 10% inferior a las de Estados Unidos en lo que va de 2013.

El caso de Japón es distinto. Los expertos estiman que “los fundamentales de las acciones parecen atractivos”, pero advierten de que se trata de “una opción cara tras el fortísimo rally” que ha experimentado el parqué nipón en lo que va de año. Por otra parte, las fuertes ventas vistas en mercados emergentes han devuelto atractivo a las valoraciones, sobre todo en Asia -China y Corea cotizan a menos de nueves veces beneficios esperados, apuntan desde Pictet-, aunque Gingené y Paolini ven un pero: “Las continuas salidas de capitales y la debilidad económica y de crecimiento de beneficios impiden una postura más optimista”.

Una última conclusión que aportan los estrategas es que, por valoraciones, la renta variable sigue atractiva frente a la renta fija. Pero, una vez más, con matices: “Según la mayoría de medidas (precio-beneficios y precio-valor contable) cotiza a niveles cercanos a las medias a largo plazo”, explican, al tiempo que añaden que “las previsiones sobre beneficios del consenso para 2014 parecen optimistas, en EEUU y la eurozona 11% y 14%.  Así que la renta variable de mercados emergentes es la única que parece muy barata históricamente”.

Muy selectivos con la renta fija

Entretanto, en Pictet han vuelto a infraponderar bonos soberanos, a los que consideran “sujetos a riesgos de mayor crecimiento económico, retirada de estímulos, riesgo en la eurozona hasta las elecciones generales en Alemania y valoraciones poco atractivas”. En este sentido, se muestran “especialmente prudentes” en deuda soberana periférica antes de los comicios. “El partido AfD anti-EU amenaza con un cambio en la postura sobre la eurozona y ello puede generar una venta masiva de deuda de Italia, España y Portugal”, afirman los expertos de la gestora, aunque admiten mantener “una posición a la baja en deuda pública italiana”.

También están infraponderados en deuda denominada en divisa local en mercados emergentes. “En estos países la situación económica justifica recortes de tipos de interés en muchos casos, pero una política monetaria más relajada implica más presión bajista para sus divisas”, razonan los expertos, que también advierten de lo contraproducente de subidas de tipos para frenar la apreciación de las divisas, porque podría dañar el crecimiento. 

En cambio, conservan su exposición a deuda corporativa con grado de inversión y a high yield, y pretenden incrementar su exposición a esta última, ya que “su venta masiva ha llevado los diferenciales a niveles que no se corresponden con el fuerte perfil crediticio, con rendimientos atractivos del 5,5% en Europa y del 6,5% en EEUU”. Ginguené y Paolini consideran que este tipo de activos presentan una baja sensibilidad a las variaciones de tipos de interés y además pueden beneficiarse del crecimiento económico, con reducción de diferenciales.

No son las únicas razones. Por un lado, estiman que la retirada de estímulos de la Fed no será agresiva. Por otro, esperan que las tasas de impago sigan en niveles inferiores a la media –según Moody’s por debajo de 3% en la eurozona los próximos 12 meses, por debajo de la media a largo plazo de 5,5%-. “A ello se añade que, tras el pronunciado descenso del volumen de emisiones, la dinámica oferta/demanda ha mejorado, lo que debe mantener los diferenciales a corto plazo”, concluyen al respecto.