La seguridad económica en la jubilación de España cae con fuerza y se sitúa como uno de los peores países de Europa

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Aaron Burden (Unsplash)

Tiempos difíciles para el inversor. Sobre todo para quien entra en su jubilación. Según el último Índice mundial de pensiones elaborado por Natixis IM, 2022 podría ser el año más difícil en el que jubilarse de la historia reciente. Y es que no estamos en el mejor entorno de mercado para  el ahorro destinado a las pensiones. La seguridad en la jubilación está sometida en el mundo a una presión creciente, ya que la inflación, la volatilidad del mercado y los bajos tipos de interés están mermando los ahorros destinados a ellos.

El Global Retirement Index de Natixis IM, que ahora cumple diez años, es una medida multidimensional diseñada para analizar los factores que respaldan la seguridad en la jubilación mediante la combinación de indicadores clave fundamentales para el disfrute de un retiro saludable y seguro. Y en la edición de 2022, revela un panorama sombrío. “Los jubilados se arriesgan no sólo a tener que echar mano de su ahorro destinado a la jubilación, ya de por sí erosionado, sino que tendrán que asumir mayores riesgos en sus carteras para recuperar el terreno ya perdido”, advierten desde la gestora.

Sophie del Campo, responsable de Natixis para el Sur de Europa, Latam y US Offshore, ve fundamental que se impulsen los incentivos adecuados para fomentar el ahorro de largo plazo. Al mismo tiempo, defiende que los profesionales financieros tienen que adaptarse y poner al cliente en el foco de toda la estrategia. “La clave está en saber construir carteras de largo plazo, bien diversificadas, descorrelacionadas y que contemplen los principios de sostenibilidad”.

La seguridad económica en España se desploma

Y si ya es un contexto complicado para la jubilación a nivel global, en España la situación es más difícil aún. En España, la seguridad en la jubilación ha descendido bruscamente, En 2022 se sitúa en el puesto 38. Son seis escalones menos que en 2021 y 2020, solo por delante de China, Grecia, Turquía, Colombia, Brasil e India.

En los cuatro subíndices que mide el GRI, España ocupa el siguiente lugar en el GRI de 2022:

  • 18º en Salud: Es el único subíndice en el que España ha crecido, con una puntuación de 85% en esta edición, respecto al 82% de 2021 y al 83% que ostentaba hace 10 años.
  • 19º en Calidad de vida: Subíndice en el que España mantiene la puntuación de 74% en 2022, idéntica a la de 2021. Eso sí, en 2012 era algo superior al registrar un 76%.
  • 22º en la categoría Finanzas en la jubilación: En la que este año ha obtenido una puntuación de 59%, inferior a 2021 y a 2012 cuando sus puntuaciones respectivas eran del 61% y 69%.
  • 40º en Bienestar material: Con una puntuación de 15% en esta edición frente al 35% de 2021 y el 58% de 2012.

España ha bajado desde el puesto 26 en el que se situó en 2012 hasta el puesto 38 que registra en la edición de GRI de este año. Estamos ante un descenso de 12 puestos en 10 años. Los principales indicadores que explican esta caída son los subíndices de Bienestar Material y Finanzas. En el caso del Bienestar, el factor determinante es el indicador de empleo. En lo que se refiere a Finanzas, confluyen elementos como los  préstamos morosos de los bancos, los tipos de interés, la dependencia de la tercera edad y el endeudamiento público. Por otro lado, España ha mejorado en el subíndice de Salud, gracias a, entre otras cosas, haber registrado la cuarta posición más alta en el indicador de esperanza de vida; y en el subíndice de Calidad de Vida gracias a una mayor puntuación en el indicador de felicidad y en el indicador de biodiversidad.