Las claves para navegar el sector tecnológico

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Firma: Joshua Sortino (Unsplash).

El sector tecnológico se ha ganado el favor de los inversores, sobre todo a raíz de la pandemia. Pero no es un tema de inversión sencillo por más que nos parezca cercano y estemos familiarizados con él. Varios gestores debaten sobre su potencial, las valoraciones, el enfoque geográfico o cómo abordar su transversalidad en un desayuno organizado por FundsPeople y patrocinado por Aegon AM.

Mayor diversificación en EE.UU.

Jaime Espejo (Imantia

Jaime Espejo, gestor de renta variable de Imantia, reconoce que se trata de un sector cuyas valoraciones pueden parecer más ajustadas, sobre todo en la parte de semiconductores, pero también apunta que en muchos casos están justificadas por el posicionamiento y la calidad de las compañías. Explica que, frente a Europa, EE.UU. ofrece a los inversores mayor capacidad de diversificación y número de temáticas. “En Estados Unidos hay un mayor dinamismo en el desarrollo del sector de la tecnología porque cuenta con una mayor capacidad de emprendimiento y un mayor desarrollo e impulso al sector”.

Dicho esto, asegura que no hay que despreciar las compañías europeas. Ahí está, por ejemplo, una empresa como ASML, una firma puntera y líder mundial en el segmento de semiconductores, subsegmento del cual es obligado mencionar los cuellos de botella en la producción que está sufriendo, y de los que están hablando todas las empresas en sus presentaciones de resultados. “Esto demuestra que el componente tecnológico ha ido ganando relevancia en la economía incluso en empresas o sectores donde ni se podía imaginar hace unos años la importancia de su peso actual”.

Considera que la tecnología tiene todavía potencial, no solo en la parte de semiconductores, y no solo en EE.UU. En Europa ve oportunidades en segmentos como el software empresarial o la nube y advierte de las diferentes perspectivas a la hora de valorar estas acciones que se tienen a uno y otro lado del Atlántico. “En Europa solemos prestar más atención a múltiplos como el PER, en lugar de a los crecimientos esperados. Habría que cambiar un poco el enfoque en sectores como el tecnológico”.

Las tres cosas buenas de China

Guzmán Hernández (Unigest)

A Guzmán Hernández, gestor sénior de Unigest (Grupo Banco Unicaja), le gustan más China y EE.UU. que Europa a la hora de tomar posiciones en tecnología. Del gigante asiático, del que afirma que “tiene una réplica de todas las megacaps americanas del sector”, destaca tres atractivos: su gran y compacto mercado local (con una población de unos 1.300 millones vs. 450 millones de EE.UU.); un PIB per cápita lejos todavía del de EE.UU., con la consiguiente esperada reducción de ese gap; y el hecho de contar con un mercado mucho más protegido frente a los competidores que el americano, “lo que permite a sus compañías que puedan hacerse fuertes, testar todo”. Todo ello sin olvidar la caída que han sufrido las valoraciones de las empresas frente al optimismo en EE.UU., lo que convierte a las firmas chinas en un interesante objetivo de inversión.

De Europa destaca que el sector tecnológico está muy centrado en el hardware. “Falta inversión en la parte de software o de aplicación de soluciones tecnológicas dentro de negocios reales, como en ciberseguridad o la virtualización de máquinas”. Asegura que en el Viejo Continente no hay empresas dedicadas en exclusiva a ello. “Hay compañías que cuentan con estas áreas, pero el problema es que no tienen suficiente masa crítica para competir con la misma fuerza que las firmas americanas”.

También considera interesante dentro del sector tecnológico el desarrollo de softwares destinados a pymes, producción que hasta ahora iba dirigida fundamentalmente a grandes compañías, y pronostica un crecimiento exponencial de áreas como la de videojuegos o streaming de televisión, segmentos en las que se están metiendo con fuerza las FAANG.

Cuidado con los conflictos de gobierno corporativo

Antonio Hormigos (Sabadell AM)

En Sabadell AM ven el sector tecnológico desde dos puntos de vista. Desde uno más coyuntural, consideran que hay que añadirlo como uno más en el análisis de sectores de ciclo económico y de valoraciones. “Este es un punto de vista que usan los gestores en su análisis más inmediato, en sus composiciones de cartera para hacer cambios más a corto plazo”, explica Antonio Hormigos, especialista en inversiones de la gestora, quien añade que desde este punto de vista es un sector que ven adecuado para una fase de consolidación del ciclo económico, “porque aunque no es el más explosivo en cuanto a crecimiento de resultados inmediato (hay otros como energía e industrial, que están teniendo una recuperación mucho más fuerte de beneficios), mantiene unos crecimientos altos más sostenidos en el tiempo porque depende de asuntos relacionados con ciclos de inversión que van más allá del puro ciclo económico”.

Pero, a su juicio, lo más interesante del sector tecnológico es vincularlo a aspectos de medio y largo plazo. ¿Por qué? Considera que el proceso de digitalización del mundo está en una fase “no sabemos si inicial o intermedia, pero desde luego no la final”. Por lo tanto, está convencido de que “el proceso de inversión en aspectos ligados a la digitalización de todas las actividades va a seguir vivo y, como resultado, el sector va a seguir creciendo”. No obstante, le preocupa la fragmentación que se está produciendo. “Años atrás era un sector más globalizado. Y ahora vemos cómo se ha convertido en clave para algunos países, en particular China, lo que está revirtiendo esa tendencia”.

También le inquietan los posibles conflictos de gobierno corporativo y algunos aspectos ASG en los que están entrando las compañías tecnológicas. “Es un aspecto a tener en cuenta y que está influyendo en las decisiones de inversión actualmente. En nuestras carteras, por ejemplo, hay empresas muy grandes que no están presentes por este tipo de consideraciones”.

Compañías que venden en todo el mundo

María Jesús Martínez (CaixaBank AM)

“La tecnología y las comunicaciones van a ser los sectores que van a transformar el mundo en los próximos cinco años. Esa es la clave para que haya potencial de crecimiento”. Es la opinión de María Jesús Martínez, gestora sénior de CaixaBank AM. Entre las áreas que subraya como claves para que ese crecimiento se produzca destaca el big data, la inteligencia artificial, el internet de las cosas, el vehículo eléctrico y todo lo relacionado con la movilidad, la ciberseguridad, el cambio climático, el uso de las baterías y la demografía (cambios de hábitos y generación Z).

Además, pone otro tema sobre la mesa. “En este sector hay que tener en cuenta que alrededor del 60% de las ventas de las compañías tecnológicas americanas se destina a otros países, y un 20% de ese porcentaje va a parar a regiones emergentes. Son americanas, pero sus ventas son globales. Por tanto, invertir en ellas es hacerlo a nivel global de forma explícita”. De Europa destaca que el sector tecnológico va avanzando y su peso en el mercado está ya por encima del 10% (dentro del Eurostoxx). Y, en general, hace hincapié en la necesidad de ser selectivo.

Apunta que el sector tendrá relevancia los próximos años, en muchas ocasiones independientemente del momento cíclico. “Dentro de la tecnología hay mucha heterogeneidad, hay compañías con un punto más cíclico, pero otras cuentan con modelos totalmente específicos que hay que analizar de forma individual a nivel microeconómico”.

Oportunidades entre las pequeñas y medianas empresas

Elena Delfino (Aegon AM)

Elena Delfino, responsable de Aegon AM para España, coincide en subrayar la importancia de la globalidad de las compañías. Añade que “para acceder a la gama completa de oportunidades tecnológicas hay que tener amplios horizontes. Si pensamos en una clasificación del sector muy estrecha perderemos oportunidades de mercado. Por ejemplo, empresas como Facebook o Amazon son casos clásicos de firmas a la vanguardia de la tecnología, pero ninguna de ellas se encuentra según MSCI en el sector tecnológico”. El uso de la tecnología e innovación prevalece en muchos sectores. En concreto aprecian oportunidades en empresas que utilizan tecnología en aplicaciones de ciencia médica, industriales, de consumo discrecional, muchas de ellas con una inclinación sostenible.

Considera que la pandemia ha acelerado el progreso tecnológico en muchos ámbitos. El efecto COVID desaparecerá, “pero gran parte del cambio será permanente. Cita la infraestructura de comunicaciones, los pagos en línea o los servicios de transformación digital. En estas áreas es donde vemos las oportunidades más importantes y duraderas”. Pone algunos ejemplos de a qué se dedican empresas que tienen en cartera y que consideran que tienen mucho potencial: una que utiliza inteligencia artificial para analizar el rendimiento de las app y luego mejorarlo de una manera que no sería posible para un humano u otra que proporciona software regulatorio basado en la nube. No solo software, también considera muy importante la parte de semiconductores.

Hay oportunidades, y también riesgos. Por ejemplo, cita el hecho de que el índice MSCI de tecnología está muy concentrado en EE.UU. o de que sea un sector sensible a tensiones geopolíticas. Apunta, además, que la creciente regulación y supervisión del Gobierno chino al sector ha generado incertidumbre, “pero también oportunidades para entrar en los gigantes tecnológicos asiáticos a buen precio”. Por último, destaca que la gestora tiende a enfocarse en pequeñas empresas porque es donde encuentran más atractivas oportunidades a precios baratos. No obstante, “también nos gustan las megacaps por su modelo global de ventas. Pero ahora es menos necesario contar con un gran capital para empezar a tener escala, lo que ayuda a muchas empresas pequeñas y medianas en este sector”.