“En 2012, hemos observado dos tendencias que han concentrado la mayor parte de las entradas de dinero en ETF: la búsqueda de seguridad en la primera parte del año y, posteriormente con la recuperación gradual del apetito por el riesgo en el verano, el gran interés por la deuda corporativa y por la renta variable de países desarrollados y emergentes”. Para Valérie Baudson, directora de Amundi ETF, 2013 debería marcar un punto de inflexión y un desafío para la asignación de activos. “Mantendremos el objetivo de ofrecer productos innovadores y competitivos que satisfagan las necesidades de los inversores”, afirma la responsable.
Por lo pronto, el año pasado Amundi ETF registró un crecimiento de los activos gestionados, con captaciones netas por importe de 1.400 millones de euros. Esto supone un incremento del 37% de los activos bajo gestión, que han pasado de 6.500 millones de euros a finales de diciembre de 2011 hasta los 8.900 millones de euros a finales de 2012, en comparación con el crecimiento global del mercado cifrado en el 22 %. “Esta tendencia ha continuado en 2013, superando en enero la barrera de los 9.000 millones de euros de activos bajo gestión”, asegura la entidad en un comunicado.
Según explica la firma, la innovación y las expectativas de los clientes han representado los principales puntos de referencia para el desarrollo de productos. En 2012, Amundi ETF amplió con dos nuevas exposiciones la gama, que consta de más de 100 ETF. El plan de desarrollo europeo de la entidad consumó una nueva etapa en el mes de abril con la entrada en el mercado español, reforzando al mismo tiempo su presencia local en el resto de los principales países europeos. “La gama incluye actualmente más de 430 ‘cross-listings’ y registros en siete países europeos: Francia (102), Alemania (75), Italia (75), Holanda (75), Suiza (55), Reino Unido (43) y España (8)”.