Las EAFI: divididas a la hora de asumir riesgos

Los asesores financieros independientes españoles suelen cuidar las carteras de sus clientes de forma individualizada y en función de su perfil de riesgo, huyendo en la mayoría de los casos de las llamadas carteras modelo. Sin embargo, en este contexto de mercado convulso casi todas tienen unos activos favoritos, aquellos donde ven más oportunidades. Para la mayoría, que invierte a largo plazo, los activos por los que hay que apostar de cara a los próximos meses son el crédito corporativo, la deuda emergente y la renta variable –sobre todo fuera de Europa y en sectores como las tecnológicas estadounidenses o las exportadoras alemanas y valores de alto dividendo-, si bien algunos consideran que los activos de riesgo están aún sobrevalorados y mantienen altas posiciones en liquidez o deuda pública de países “seguros”. Las EAFI también apuntan a alternativas de inversión para los próximos meses como las materias primas –sobre todo el oro-, el mercado japonés, la volatilidad o productos de retorno absoluto y advierten sobre la necesidad de cubrir el dólar en las carteras.

 

Entre los asesores que apuestan por activos de riesgo está Félix González, socio director general de Capitalia Familiar, que afirma que, en general, sus preferencias se decantan por la renta fija corporativa de ratings relativamente bajos, y por la renta variable de fuera de Europa. También creen que es un buen momento para entrar de bolsa desde Serfiex Investments, que apuestan estratégicamente por el activo. “Como gestores de riesgos nos cuesta mucho sacar la bola de cristal pero nos cuesta poco revisar la historia y aprender de sus lecciones. Y la historia nos dice que durante los últimos 10 años las bolsas, en media, no han subido”, comentan, añadiendo que la prima de rentabilidad media de la bolsa internacional en los últimos 110 años (desde principios del siglo XX) ha sido del 5% sobre las letras del Tesoro. “Además no se recuerdan más de dos décadas seguidas con rentabilidades negativas. Si apostamos por un crecimiento global y ordenado del PIB mundial, apostaremos también por una subida de las bolsas mundiales”. Por eso, creen que la mejor recomendación para un ahorrador a largo plazo es que invierta parte de su riqueza en el activo de forma diversificada en al menos los cuatro bloques clásicos: Estados Unidos, Europa, Japón y emergentes.

 

Dentro de la renta variable, Juan Carlos Costa cree que, aunque el riesgo está servido, “hay valores muy castigados dentro del sector bancario, los bancos medianos tipo Banesto o Bankinter serían dos apuestas claras. Abertis, Iberdrola, Sacyr  y Gamesa también podrían ser cuatro apuestas claras, con las dos primeras tranquilas y las dos segundas con un riesgo medio. Y buscando ya con un perfil de riesgo alto podríamos mirar tanto a Prisa como a Ezentis”. Por su parte, desde la EAFI Miramar son positivos con el mercado americano, pues “ofrece valoraciones muy interesantes tras las recientes caídas y las empresas que seleccionamos para nuestras carteras son líderes en sus mercados y continúan anunciando mejores resultados de lo esperado. No somos muy optimistas con la zona Euro”, matizan. Sara Perez-Frutos, directora de Dracon Partners, apuesta más bien por la tecnología estadounidense como activo refugio para el verano y también por las exportadoras alemanas. Con todo, en su posicionamiento sólo tiene el 50% en renta variable, un 10% en renta fija y el 40% en liquidez, a la espera de más recortes para comprar a mejores precios. “Estamos en una posición defensiva, pero con la pistola cargada para aumentar posiciones”, afirma. Al igual de preparados que están en Gestión de Finanzas, una EAFI cuya cartera está formada en su parte estratégica por activos conservadores -con fondos de deuda con grado de inversión, renta fija a corto plazo, gestión alternativa y una pequeña parte en deuda emergente-, pero lista para aprovechar los repuntes de volatilidad tomando posiciones en activos de riesgo de manera táctica”. Basamos nuestras recomendaciones en el asesoramiento activo de las carteras intentando aprovechar las oportunidades que nos da el mercado”, explican.

 

Con respecto a la renta variable, Carlos Heras, consejero delegado de Aspain 11, considera también que es un buen momento para construir una cartera, tanto en España como en Europa, de valores con alto dividendo y comprando más partidas en diferentes plazos. “Vía fondos de inversión, optaríamos por zonas geográficas más alejadas y siempre entrando en fondos con buen histórico, en las primeras posiciones de rentabilidad y con comisiones más bajas que la media del mercado”. Así, llevan meses incrementando posiciones en el Amundi International Sicav EUR, teniendo en cuenta los últimos recortes.

 

En renta fija, la EAFI se decanta por deuda corporativa pero de mayor riesgo, debido a su mayor retorno, citando como ejemplo emisiones de Ferrovial con vencimiento 2014 con TIR del 8% u OHL con vencimiento en 2015 con TIR del 7,2%. Otra idea que proponen son los productos de retorno absoluto, cuyo peso han aumentado las carteras en las últimas semanas, como el PIMCO Total Return Eur Hdg y, en renta fija mixta, el M&G Optimal Income. Para la parte de liquidez están situados en el JPM Income Opportunity. “La nota característica en estos momentos es de tenerlos mayoritariamente en euros, puesto que la crisis de deuda de los periféricos y las dudas de la economía americana nos hacen ser reacios a entrar en dólares”, apostilla.

 

También desde Profim advierten de la necesidad de cubrir el dólar en las carteras a la hora de entrar en EEUU. Para estos meses, consideran interesante la renta fija corporativa, aunque de calidad media y alta y con una presencia de las bolsas sólo destinada a las carteras de mayor riesgo, ante la volatilidad del mercado, y principalmente norteamericana y puntualmente alemana. Desde la EAFI también sugieren tener cierto peso en oro y presencia indirecta en Japón.

 

Para los vaivenes del mercado, desde Skipper Capital apuestan por fondos de volatilidad, además por renta fija corporativa distressed de al menos 3 años. Por su parte, Josechu Carballedo, socio director de Neo Inversiones Financieras, opta por una estrategia de río revuelto tras “las caídas indiscriminadas de agosto”, consistente en la compra de valores concretos, tanto de renta variable como de renta fija, escogidos con un horizonte de inversión de medio plazo. “En épocas de crisis la paciencia tiene su recompensa”, afirman desde la EAFI.

 

Pero no todos los asesores se envalentonan en las crisis. Hay algunos que optan por pasar estos meses sin correr riesgos, como Salvador Cervilla: “Mi posicionamiento es muy conservador, demasiados riesgos hay en estos momentos y que no controlamos hay para afrontar el verano, mi planteamiento sería depósitos y renta fija privada para pasar el verano tranquilo y sin sobresaltos”. Y es que hay expertos, como John Siska, que cree que desde un punto de vista de largo plazo, que los activos de mayor riesgo están sobrevalorados. En las carteras de Ética Patrimonios prima la seguridad, pues la mayoría de sus clientes tienen un perfil conservador. “Para capear el verano, hemos reducido la exposición a renta variable y deuda pública para centrarnos en liquidez en divisas como el franco suizo o la corona noruega, planes de ahorro flexibles y pequeñas apuestas en materias primas (oro, crudo y agrícola), renta fija corporativa high yield y deuda emergente en moneda local”.  Además, para los inversores que no quieran salir de la bolsa proponen sectores tradicionalmente defensivos como el sector salud y el lujo, los que “mejor aguantarán si las cosas se ponen mal”.

 

También apuesta por la liquidez Ana Fernandez, directora ejecutiva de AFS, que apunta asimismo al oro como posición defensiva y la deuda de países más seguros. “Este año está siendo particularmente difícil, con mucha volatilidad y situaciones de gravedad en algunos países periféricos. Nosotros aconsejamos tener liquidez para aprovechar las oportunidades que puedan surgir. Seguimos manteniendo nuestras posiciones en oro y franco suizo y en gobiernos de países como Dinamarca o Suecia que tienen rating AAA con perspectiva estable”, afirma. Bonos de países en esta línea y divisas son también la respuesta de Íñigo Susaeta, socio director general de Arcano Wealth Adivisors EAFI, que ante la volatilidad y el nerviosismo responde de dos formas: primero, proporcionando una cartera estratégica diversificada en cuanto a su exposición a los distintos factores de riesgo (crecimiento, subida de tipos, crédito, inflación, etc.); y segundo, tomando medidas tácticas de cobertura, que permitan disminuir el riesgo en los momentos de estrés sin tener que vender los activos que componen la cartera estratégica”. Ahora recomiendan mantener una exposición a divisas y bonos de países con buenos fundamentales, tanto desarrollados (Canadá, Noruega o Suecia) como emergentes asiáticos. Eso sí, reconoce que “los ataques a la deuda periférica están creando y van a crear oportunidades de compra interesantes para quien haya mantenido un nivel elevado de liquidez, mientras de momento seríamos más prudentes a incrementar el peso en renta variable y materias primas, a pesar de las bajadas que han experimentado recientemente”.

 

Es una de las pocas excepciones que apuesta por la deuda pública, pues la mayoría de las EAFI consultadas la descarta; entre ellas, Aspain 11 (“No recomendamos en los actuales momentos de crisis de deuda entrar en deuda pública ni depósitos bancarios hasta que no se conozca con profundidad la regulación de los “extratipos” y los balances se saneen con todos los créditos dudosos”) o DiverInvest.

 

Prudencia: la consigna

La prudencia es asimismo la consigna de Rosa Coma, de DiverInvest, donde el objetivo principal es no perder dinero y por eso no apuestan ni por la renta fija ni por la variable. “En estos momentos, no aconsejamos tener renta fija en las carteras de inversión y tampoco los resultados de las compañías  están siendo tan buenos como esperábamos, por lo que pensamos que hay que volver a ser muy prudentes y tener poca inversión en renta variable”, afirma. Prudencia también la de Crisóbal Amorós Arbaiza, que selecciona rigurosamente los gestores y los productos de inversión para aguantar mejor la volatilidad y la convulsión de los mercados. “Tenemos claro que no nos gusta tomar decisiones en momentos de pánico, ni dejarnos llevar por él.   Nuestra responsabilidad está en gestionar adecuadamente el miedo y la ambición, que acompañan siempre a las decisiones de invertir”, asegura.

 

Jorge Coca, desde Wealth Solutions EAFI, afirma que desde el punto de vista táctico de las carteras a medio plazo tiene más respeto la renta fija que la variable por el entorno inflacionista y de tipos altos en el que estamos entrando desde hace ya varios meses. “Dicho esto, creemos que hay que estar invertidos en renta fija también pero de forma más protegida a las subidas de tipos y por supuesto, bien diversificadas para eliminar el riesgo específico”.