“Hemos notado que empresas con criterios y buen ranking ASG (ambientales, sociales y de buen gobierno corporativo) se han comportado notablemente mejor en tiempos de crisis en comparación con otras que no los aplican”, asegura David Carrasco, de BBVA GPP, que intenta desmontar así la idea generalizada entre la comunidad inversora de que los productos financieros clásicos obtienen una mayor rentabilidad que aquellos que usan un enfoque ISR.
Durante la mesa de debate “La Inversión Socialmente Responsable como respuesta a la crisis económica: impacto y nuevas oportunidades”, organizada en colaboración por Spainsif y la UNED, Francisco Llobet, responsable de Planes de Pensiones de Empleo de Ibercaja, añade que “la medición de ISR evita riesgos y ayuda a la rentabilidad y a la sostenibilidad al mismo tiempo”, por lo que “lo idóneo sería que los rating de sostenibilidad tuvieran la misma aceptación que los financieros”, reclama.
¿Qué nuevas oportunidades puede generar la ISR como respuesta a la crisis económica?
David García, de Santander AM, las enumera según el actor que intervenga en el proceso. En cuanto al inversor, “le muestra las potencialidades de su inversión y le involucra con mayor compromiso y eficiencia en su toma de decisiones”. Respecto a la empresa, “ofrece un mayor análisis de su negocio, logra mayor vinculación de empleados y accionistas, y da una mejor imagen de marca”, lo que se conoce como RSC (Responsabilidad Social Corporativa).
Finalmente, en lo que se refiere a la sociedad, “genera empresas más concienciadas en la gestión de los recursos”, aspecto especialmente importante en un momento en el que “el medio ambiente ha perdido su importancia y lugar a la vez que se está produciendo una regresión social debido a la obsesión por el corto plazo”, critica Carrasco.
Sin embargo, pese a que la crisis ha sido devastadora a la hora de decidirse por los criterios ASG en las inversiones, no todo han sido malas noticias para la ISR en España, ya que ahora existe un “mayor foco puesto en el gobierno corporativo, para el que una demanda generalizada en la sociedad pide comportamientos más éticos”, según Carrasco.
Por otra parte, Patricia de Arriaga, subdirectora general de Pictet AM, ofrece útiles consejos a tener en cuenta para la ISR en un futuro cercano. Considera necesario “ejercer los derechos de los accionistas en las juntas generales de las compañías” o “analizar la sostenibilidad de la deuda a la hora de invertir en bonos soberanos”, donde reclama mayor protagonismo para los países emergentes, dada su “gran importancia y su escasa representación en este mercado”.
