Su propuesta para el mercado nacional es una filosofía “de sentido común”, canalizada en dos fondos cinco estrellas Morningstar especializados en deuda corporativa.
Gestión activa y de sentido común para batir a los mercados de renta fija. Es la propuesta del desembarco más reciente en España. Absalon, el brazo institucional de la gestora independiente más antigua de Dinamarca, Formuepleje (1986), aterriza en el mercado español con dos propuestas en el espacio de crédito: el Absalon Global High Yield y el Absalon Emerging Corporate Debt.
Klaus Blaabjerg, director y gestor en Absalon, define su filosofía como bottom up y de sentido común. “Cuando compramos un bono corporativo estudiamos la inversión como si fueramos a dar un préstamo a la compañía”, explica. Esto es, que buscan obtener un spread y que sea alto en comparación con el riesgo de crédito que están tomando. También se cuidan de no perder el dinero del principal, por eso defiende su decision de no invertir en bonos CCC o start-ups.
Es un enfoque sencillo, pero cada vez menos común. Blaabjerg remarca que muchos gestores tienen un fuerte sesgo hacia los corporativos estadounidenses incluso en fondos globales. “A esto lo llamamos abrazarse al índice”, cuenta. En Absalon buscan a conciencia alejarse de los índices. “En la gestión pasiva y de ETF los inversores en realidad solo están comprando los corporativos con más deuda emitida. Muchas veces se les olvida preguntarse se de verdad querrían prestar su propio dinero a todos los negocios de un índice”, afirma.
Ambos fondos cuentan con un patrimonio de 110 millones de euros cada uno y los activos bajo gestión total del grupo Formuepleje ascienden a 10.000 millones. La gestión está en manos de cuatro gestores senior, dos analistas de crédito y un gestor de riesgo. Es un equipo con skin in the game ya que entre los cuatro tienen el 35% del accionariado de la firma, Absalon Corporate Credit.
Los cuatro gestores llevan trabajando en equipo más de una década y han superado juntos la crisis de 2008. La estrategia del Absalon Global High Yield se ideó en 2007 y unos años después ampliaron su gama con el fondo de corporativos emergentes en divisa fuerte tras detectar muchas historias interesantes en el mercado.
Ahora, en formato de fondos UCITS, los dos cuentan con las cinco estrellas Morningstar. El ABSALON - Global High Yield I EUR ha generado una rentabilidad anualizada desde su lanzamiento (2015) del 4,42%; el ABSALON - EM Corporate Debt I EUR (2015), del 4,69%. No es ninguna coincidencia, según defiende Blaabjerg, sino el resultado de una estabilidad en el equipo, la filosofía y el proceso. “Creemos firmemente que los próximos años seguiremos generando alpha para nuestros clientes a través de una gestión activa del riesgo de crédito”, sentencia.