PIMCO Global Multi-Asset Fund
Hace unas semanas ha llegado a España el Pimco Global Multi-Asset Fund, la propuesta de la casa estadounidense para aquellos clientes que quieran un fondo de asignación de activos diferente, centrado en las visiones macroeconómicas de la firma, que tiene su mejor exponente en Mohamed El-Erian, y con una aproximación al control de riesgos distinta.
El producto esta gestionado por Mohamed El-Erian, Curtis Mewbourne y Vineer Bhansali y tiene flexibilidad absoluta para invertir en toda clase de activos en el mundo entero. “Estamos en un periodo con muchos cambios, con una alta volatilidad y es necesario tener una visión más táctica a la hora de invertir para poder sacar provecho de las oportunidades que se presentan en cada momento”, explica Mark Taborsky, responsable de desarrollo de productos de asignación de activos quien visitó Madrid hace unos días.
Las estrategias de Pimco en asset allocation se centran en sus visiones macroeconómicas para el futuro, con una alta diversificación por factores de riesgo en cada clase de activos y cubriendo los factores de eventos extremos que pudieran influir en la cartera. “Los eventos extremos ocurren más a menudo de lo que nos pensamos, así que si eres un inversor a largo plazo merece la pena cubrirte ante ellos”, dice Taborsky. “Hemos designado un producto con el que dormir tranquilo porque sabes que estás cubierto ante lo improbable”.
Así, al crear la cartera los gestores distinguen entre tres fases: una asignación de activos topdown que distingue entre acciones, bonos, materias primas e inmobiliario y para la que se utilizan fondos de Pimco, ETF, derivados y bonos o acciones individuales, una segunda parte en la que se utilizan derivados y acciones y bonos tras una selección bottomup y, por último se destina el 0,5% de la cartera a cubrir los eventos extremos a través de opciones. Las posiciones en commodities se obtienen a través del índice DJ-UBS CI, y el oro a través de swaps y ETF, mientras que para la parte inmobiliaria recurren a los REIT, aunque ahora no tienen en cartera. “La decisión principal a la hora de crear la cartera es pensar cuánta renta variable debes tener ya que ahí radica el principal riesgo que se debe tener en cuenta”, dice Taborsky. A cierre de marzo, el 27% de la cartera estaba en bolsa de mercados desarrollados, el 11% en mercados emergentes, el 32% en deuda desarrollada y liquidez, el 13% e bonos emergentes y el 17% en activos reales.
Este fondo tiene como objetivo un retorno de entre el 8 y el 10%, con una volatilidad anual en torno al 10% y desde que se lanzó en 2008 ha obtenido una rentabilidad del 22,3% con una volatilidad del 8,6%.