Los vaivenes políticos de Italia no preocupan demasiado a las entidades españolas

Enrico_Letta
Palazzochigi, Flickr, Creative Commons

Italia vuelve a dar que hablar, aunque sus vaivenes políticos ya no preocupan tanto al mercado. “La inestabilidad política en Italia es, más que un riesgo, una característica”, define Ignacio Cantos, director de Inversiones de atl Capital, para quien es un alivio el hecho de que “la administración es capaz de seguir funcionando sin que la economía pierda ritmo”.

El pasado jueves, el hasta ahora primer ministro italiano, Enrico Letta, anunciaba su dimisión tras diez meses al frente del Gobierno. ¿La razón? La presión interna a la que había sido sometido por el alcalde de Florencia y secretario general del Partido Democrático (PD), Matteo Renzi, quien se postula como sucesor en el cargo si el presidente de la República, Giorgio Napolitano, le da su visto bueno. Una mayoría de 136 votos en el PD (frente a 16 en contra y 2 abstenciones) condenaron la gestión político-económica de la crisis de Letta.

A pesar de que todo este tipo de sucesos pueden generar cierta inestabilidad, José María Luna, director de Análisis y Estrategia de Profim, considera que hay dos puntos “mucho más importantes” a tener en cuenta: “que el ritmo de reformas económicas no se frene en Italia” y “que, en un mercado más normalizado, es decir, menos adulterado por las políticas monetarias procedentes de los principales bancos centrales, los inversores y, por ende, los mercados, estarán más pendientes de la parte macro y micro a nivel mundial”. A juicio de Luna, sólo se produciría una “parálisis del país” de darse un escenario extremo con nuevas elecciones y una interrupción de las reformas estructurales en Italia. Sin embargo, cree, “por suerte, los inversores cada vez toman menos en serio a los políticos y sus salidas de tono”.

Para los expertos españoles, la sorpresa es “relativa”, como la califica Cantos. “Italia es un país que, desde la Segunda Guerra Mundial, ha tenido más de 50 gobiernos con una duración media de poco más de un año, y sólo uno -Berlusconi- ha agotado una legislatura”, pone en contexto la sucesión el director de Inversiones de atl Capital.

De todas formas, a pesar de esa relatividad, para Profim existe un riesgo sobre la mesa. “Unos de los riesgos que valoramos es que, al separarse cada vez más la evolución de los mercados financieros europeos (bajadas de primas de riesgo, subidas de las bolsas, etc.) de la realidad económica de muchos países (altas tasas de paro, crédito que no fluye, endeudamiento público muy importante, altos impuestos, poca voluntad política de reducir gastos públicos superfluos, etc.), en el momento que haya elecciones generales en un país se llegue a una situación ‘a la italiana’, con una gran atomización de sus parlamentos”, explica Luna, quien puntualiza que “eso haría complicada la gobernabilidad del país, con riesgo incluso de cierta parálisis de reformas”, aspecto que es “un riesgo que nosotros sí tenemos en cuenta”.

En cualquier caso, tranquiliza Cantos, “si este acontecimiento hubiera pasado hace seis meses, probablemente la repercusión tanto en la prima de riesgo como en los mercados de renta variable hubiera sido mucho mayor y, con toda probabilidad, hubiera contagiado al resto de los periféricos”. El pasado viernes, sin embargo, la prima italiana bajaba dos puntos básicos y su mercado lo hacía, incluso, mejor que el resto de los europeos, contrapesan desde atl Capital.