Mark Dowding (BlueBay AM): “Demasiada gente ha olvidado las lecciones de los años 70”

Mark Dowding
Mark Dowding. Foto cedida (Bluebay AM)

De entrada, Mark Dowding pide disculpas. El director de Inversiones de Bluebay AM lamenta no poder ofrecer una visión más positiva del estado de la economía en Europa. Según sus últimas previsiones, los países de la Unión Europea se dirigen inevitablemente a un periodo de recesión que se prolongará varios trimestres, con una inflación que no alcanzará su pico hasta el primer trimestre del año que viene. Más preocupante aún ve la situación de Reino Unido, donde el experto vaticina una inflación por encima del 15%.

Con este escenario base, Dowding ve muy difícil que las tires de los bonos europeos puedan caer. En su opinión, el Banco Central Europeo no empezará a pensar siquiera en recortar tipos hasta finales de 2023.

Muy distinta es su visión de EEUU. De hecho, Dowding opina que la economía estadounidense no está en mal estado. “La gente se volvió demasiado paranoica y la corrección en las yields de la deuda estadounidense en julio fue excesiva. Las subidas de tipos se hicieron por las razones acertadas”, afirma. De hecho, si la tasa de los fondos federales (Fed funds) alcanza su pico por debajo del 4%, el experto cree que Estados Unidos bien podría evitar la recesión.

Su tesis se apoya en varios factores. Por un lado, ciertos indicadores, antes en niveles preocupantes, ya están dando señales de enfriamiento. Por ejemplo, el mercado inmobiliario. Por otro lado, la fortaleza del dólar frente a otras divisas también ayuda a reducir la inflación.  

La clave de las dos situaciones: la presión fiscal

¿A qué se debe esa divergencia en los caminos de la inflación europea y la estadounidense? Dowding señala la política fiscal, que muchas veces se olvida. En Estados Unidos el gobierno está adoptando una postura muy distinta al apoyo fiscal que se inyectó entre 2020 y 2021. Europa, en cambio, está en un punto muy distinto. A pesar de que su banco central está adoptando una postura restrictiva, en el plano fiscal los gobiernos se están viendo obligados a proteger al consumidor de los altos precios de la energía.

No solo va retrasada en el ciclo monetario, sino que ahora Europa está viviendo las consecuencias de una política energética equivocada. “Especialmente Alemania. Construyeron una economía de exportación financiada con energía barata procedente de Rusia. Ahora estamos viendo las grietas de ese modelo”, sentencia Dowding. En su visión, es la cosecha de decisiones políticas erróneas. “Son las consecuencias del postureo ético que ha habido con las políticas energéticas verdes las que han vuelto para mordernos. Y a la crisis energética se suma la disrupción en las cadenas de suministro y el golpe de realidad psicológico de que la guerra está en nuestra propia puerta”.

Esta tormenta perfecta es lo que le lleva a temer que la recesión que vislumbra para Europa pueda terminar siendo peor que la Gran Crisis Financiera. “Al menos en 2008 la política monetaria tenía espacio para ser acomodaticia”, subraya. Ahora tenemos a un banco central que debe subir tipos en medio de una economía débil. “No queda otra que aguantar el dolor”, se sincera.

Recordando las lecciones de los años 70

Si la economía europea se debilita sin que la inflación se calme, el riesgo no es solo de una recesión sino de entrar en un periodo de estanflación. “Demasiadas personas han olvidado las lecciones de los años 70”, lamenta el experto. Y no le sorprende. Al fin y al cabo, la mayoría de los profesionales financieros en activo nunca han gestionado en un periodo como el que divisa.

¿Y qué lecciones recordaría de ese periodo? En primer lugar, que uno no se da cuenta del cambio de paradigma de golpe, sino poco a poco. Segundo, que la inflación, cuando vuelve, lo hace con tal fuerza que resulta muy difícil de erradicar. Y tercero, que esto genera un panorama más disperso en cuanto a las perspectivas para las distintas clases de activos, donde las correlaciones históricas ya no valen.