Mark Nash (Jupiter AM): " Los tipos de interés de los bonos deben ser más altos y, cuanto más rápido sea este proceso, mejor”

Mark Nash
Foto: cedida por Jupiter AM.

La inflación ahora ha alcanzado niveles récord y se está extendiendo a todas las economías. Para controlarla, los principales bancos centrales del mundo, con la Fed a la cabeza, están endureciendo sus políticas monetarias tras un largo período de medidas expansivas. En este escenario cambiante, una de las preguntas que más se hacen los inversores es qué impacto tendrá en el mercado de renta fija. Una pregunta en la que también se detiene el responsable de Renta Fija Alternativa de Jupiter AM, Mark Nash.

"Los mercados mundiales de tipos de interés aún no han valorado hasta qué punto los bancos centrales tendrán que endurecer la política monetaria", observa el experto. “Nuestro análisis se centra mucho en el nivel de las tasas reales en lugar de las tasas nominales para evaluar el impacto”, continúa. "Las tasas reales de EE.UU. rondan el cero, un gran cambio desde los mínimos de alrededor del -2% a principios de año, pero en nuestra opinión, estos niveles aún no son lo suficientemente rígidos como para amortiguar las presiones inflacionarias en Estados Unidos y equilibrar y la oferta y la demanda”, explica.

Según el gestor del Jupiter Strategic Absolute Return Bond, fondo con Rating FundsPeople en 2022, las tasas de interés globales deben ser más altas, “y cuanto más rápido sea este proceso, mejor”, dice. “Esto significa, desde nuestro punto de vista, que podría ser un verano difícil para los tipos de interés globales: esperamos que los bonos del Tesoro a 10 años se acerquen al 4% en la segunda mitad de 2022, un nivel que no se veía desde 2010”, explica. "Sin embargo, cuando se trata de niveles de inflación que no se han visto en 40 años, no creemos que esta sea una visión extrema", agrega.

El Jupiter Strategic Absolute Return Bond Fund

La estrategia que gestiona utiliza exposiciones de renta fija tradicionales (bonos soberanos, crédito de renta fija corporativa, divisas e inflación), pero con la flexibilidad añadida de ser posiciones largas o cortas en relación en función de cuál sea su vision de mercado.

“En los mercados de bonos soberanos, esto significa principalmente usar futuros negociados en bolsa para expresar estas posiciones cortas, pero también usamos swaps de tipos de interés si el mercado no tiene una duración adecuada en futuros para la exposición que estamos tratando de expresar”, explica Nash.

“En los mercados de renta fija corporativa, también utilizamos derivados de crédito para posiciones cortas en este sector. Además, los tradicionales bonos del gobierno vinculados a índices y los swaps de inflación nos permiten tomar posiciones tanto alcistas como bajistas sobre la inflación”, continúa.

La estrategia es capaz de tomar tanto duración corta como larga (+/- 5 años a nivel de fondo). Gracias a la capacidad de operar en largo y en corto con las tasas en diferentes etapas del espectro de vencimientos, el equipo también tiene la flexibilidad de elegir con precisión la posición en la curva de tasas de interés.

“La volatilidad y el control de riesgos para la estrategia están en el corazón de nuestro negocio”, señala Nash. "Apuntamos a un nivel de volatilidad implícita de alrededor del 4-5%, que hemos elegido para reflejar la volatilidad de las acciones del Tesoro estadounidense a medio plazo", continúa. “Creemos que esto nos brinda la flexibilidad adicional necesaria para producir rendimientos positivos en cualquier tipo de entorno macroeconómico”, dice.

Posicionamiento de la cartera

Durante la mayor parte de 2022, el fondo mantuvo una posición corta en duración corta y larga en inflación. Además de eso, e influenciado por una Reserva Federal de EE.UU. cada vez más agresiva, ha mantenido una estrategia larga en el dólar. Sin embargo, en las últimas semanas, después de una importante tendencia a la baja en los bonos, el equipo se ha movido hacia una posición de mayor duración, que se ha vuelto casi plana en las últimas sesiones.

“Hemos mantenido una posición de aplanamiento en la curva, conscientes de que los tipos del banco central tienen que subir mucho para atajar el problema de la inflación”, explica el gestor. “Seguimos neutrales o ligeramente cortos en crédito, ligeramente largos en inflación y actualmente estamos más cerca de la neutralidad en el dólar estadounidense”, revela.

En el posicionamiento de la cartera, el equipo continúa siguiendo los temas macro según los cuales la inflación, aunque se espera que disminuya en la segunda mitad de este año, seguirá siendo alta. En su opinión, hasta que empecemos a ver las cifras del empleo y de actividad económica en Estados Unidos a la baja, la Fed no terminará su ciclo alcista. "Hasta que la Fed se acerque al final de su fase de endurecimiento, el dólar se mantendrá firme y los mercados crediticios seguirán tensos", concluye Nash.