Miguel Uceda (Welzia): “Las valoraciones no deberían ser el único driver de toma de decisiones de inversión”

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Aunque la recuperación ha sido más cercana a un escenario positivo que al escenario central previsto, desde Welzia señalan que existe un miedo latente a lo que pueda ocurrir en otoño e invierno. Desde que llegó la pandemia y se produjeron las fuertes caídas del merado, siempre tuvieron una fuerte convicción de que se recuperaría.

De esta crisis, destaca que hay claros ganadores (sector tecnológico) y perdedores (sectores ligados con actividad presencial). Desde su punto de vista, cree que si la economía mejora y hubiera pronto una solución al problema sanitario, lo normal seria que recuperan los sectores mas perjudicados.

Una vez recuperado una parte del mercado, considera que las valoraciones todavía siguen siendo altas. Buena parte de ello tiene que “los bancos centrales van a seguir dovish y con tipos bajos durante tiempo”, apunta Uceda. En este sentido, alerta que “los estímulos fiscales y monetarios pueden calentar mucho la maquina y provocar excesos”. De ahí que estén muy atentos a los daños colaterales.

Para el director de Inversiones de Welzia, las valoraciones no deberían ser el único driver de toma de decisiones de inversión. “Con ese argumento habríamos estado invertidos todo el rato en Europa, España o en empresas value”, reflexiona.

Según afirma, el retraso de la bolsa europea en recuperarse frente a la americana se debe a que “no tenemos campeones en tecnología, no existen esas FAANG como en EE.UU. que han ayudado a tirar a la bolsa americana”.

Desde el punto de vista de asignación de activos van dando pequeños giros, no cambios drásticos. Por ejemplo, dejaron de invertir en el Nasdaq para invertir en convertibles o deshicieron posiciones en algunos fondos growth por otro más generalistas, que no value.

En cuanto a la liquidez en términos generales han huido de los activos ilíquidos que en marzo mostraron su cara más negativa y como activo, pese a su coste, lo ven como un coste de oportunidad. “No nos importa sacrificarnos”, indica.

En este contexto, comenta que una de las claves del año ha sido apostar por la liquidez y no tener exceso de high yield. “Estábamos muy poco invertidos antes de la crisis”, subraya. A raíz de la llegada de la crisis, incrementaron el peso en crédito. “Ahora es difícil, las yields absolutas han caído por la bajada de tipos en EE.UU. y es más difícil la apreciación, es más un juego de carry”, puntualiza.