Mondher Bettaieb-Loriot (Vontobel AM): "Lo que está pasando en los mercados es una locura. Solo hay que mirar las pantallas de Bloomberg"

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Foto: cedida por Vontobel AM.

La quiebra de Silicon Valley Bank y de Singnature Bank ha provocado el mayor repunte de precios en un día de los bonos del gobierno de Estados Unidos a corto plazo. Desde el año 1987 no se había visto nada parecido. “Es una locura lo que está pasando en los mercados. Una auténtica locura. Solo hay que mirar las pantallas de Bloomberg”, nos explica en una entrevista con FundsPeople Mondher Bettaieb-Loriot, responsable de Bonos Corporativos en Vontobel AM y gestor del Vontobel Euro Corporate Bond, fondo con Rating FundsPeople en 2023.

El lunes, la rentabilidad a vencimiento de algunos bonos del Tesoro a corto plazo de EE.UU se redujo 50 puntos básicos en cuestión de horas. Comenzaron a caer en la sesión de negociación de Asia, poco después de que los reguladores estadounidenses anunciaran medidas el domingo. La rentabilidad a vencimiento de los bonos del Tesoro de EE.UU a dos años, que había superado el 5% por primera vez desde 2007 la semana pasada, estaba el lunes en el 4,12%, camino de la mayor bajada en un solo día desde 2001 y la caída más rápida desde 1987. La rentabilidad del treasury a 10 años se redujo del 3,7% al 3,53%. Por su parte, la rentabilidad del bono alemán a dos años bajó al 2,54% desde el 3,3%, algo no visto desde la gran crisis financiera de 2008, los atentados de septiembre de 2001 o el lunes negro de 1987.

El gestor, que acaba de estar de visita en España para participar en el desayuno de renta fija que cada año celebra la entidad en Madrid, se levanta de su silla, enciende el terminal y se explica. “La semana pasada, la expectativa para el mes de julio de los Fed Funds era que los tipos estuviesen en el 5,5%. Ahora, echando un vistazo a la pantalla, se observa que esa expectativa ha caído al 4,4%, cuando los tipos están en el 4,75%. Es decir: los mercados descuentan ahora que la Fed va a bajar tipos. Lo que ha pasado con Silicon Valley es un signo de que el banco central ha endurecido su política monetaria demasiado”.

Según Bettaieb-Loriot, la Fed ha ido demasiado lejos. “Necesitaba una señal para saber cuándo parar y esa señal ya se ha producido. Todo ello refuerza mi convicción de que la Fed recortará tipos en 2023”. El reputado gestor, al frente de uno de los fondos de renta fija corporativa con más patrimonio en España, recuerda además que la plasmación de los efectos de la política monetaria sobre la economía real se produce con entre dos y tres trimestres de retraso. De ahí que todavía no hayamos empezado a ver las consecuencias reales que va a tener esta política restrictiva sobre el crecimiento económico.

“Desde noviembre del año pasado, siempre pensé que estábamos cerca del final del ciclo de subida de tipos. A una pregunta de un periodista del Wall Street Journal, Jerome Powell le recordó que eran pocos los que tomaban prestado a corto plazo a los tipos de la Fed. Lo hacen a los tipos bancarios, que son más altos para hogares y empresas (del orden del 8% para los pequeños negocios). Con un crecimiento económico del 1,5%, esto no es sostenible. En Europa, los datos apuntan a que a finales del año pasado la demanda de hipotecas había caído un 70%, mientras que la de préstamos al consumo un 25%”, indica.

Eso -insiste Bettaieb-Loriot- en el cuarto trimestre de 2022. “Teniendo en cuenta ese retardo con el que va la política monetaria baja a la economía real, imagina lo que ha sucedido en el primer trimestre de este año”, advierte. Son indicadores que el experto considera muy relevantes, por su elevada correlación con la evolución de la actividad económica. “Si no hay préstamos, cae el consumo. Y esa caída del consumo se observará especialmente a partir de mitad de año. Será entonces cuando empecemos a ver bajar la inflación, incluso de manera acelerada”, augura.

Para defender su afirmación, se apoya en la elevada correlación que históricamente ha existido entre la M2 (el dinero en circulación) y la inflación. “Durante la crisis del Covid-19, la Fed lanzó paquetes fiscales por cuatro billones de dólares y la M2 se disparó. Había mucho dinero en el sistema y los precios subían porque los consumidores estaban dispuestos a gastarlo. A partir de octubre de 2022, la M2 colapsó, pero la inflación se ha mantenido. ¿Cómo es posible con unos precios del gas que en Europa están en niveles pre-invasión de Ucrania? Porque va con un decalaje temporal de 15 a 18 meses. En febrero del próximo año estará en torno al 2,5%”, anticipa.

Según el gestor, en realidad los bancos centrales no saben lo que están haciendo. “Estamos asistiendo a una política monetaria experimental. Ahora, deberían parar y ver qué pasa. Sería lo más prudente”. La gran pregunta que se hacen en estos momentos muchos inversores es si ese paso atrás que deberían estar a punto de dar los bancos centrales, en especial la Fed, será bueno para los activos de riesgo o no. “Todo depende de cómo de profunda sea la recesión. Si es leve, sí. Si es aguda, no”. Por lo pronto, para la renta fija corporativa europea, él espera una rentabilidad para este año del 8%. “Estadísticamente, teniendo en cuenta las yields actuales y del entorno del que veníamos, es lo que ha rentado el activo”.