Nueva caída del precio del oro, ¿qué factores explican las fuertes ventas?

Oro
Bill David Brooks, Flickr, Creative Commons

Las alarmas saltaban el lunes por la mañana al registrar el oro una caída íntradía de más del 4%, llevando al Bloomberg Commodity Index a mínimos de 13 años. Las materias primas y particularmente los metales llevan ya algunas semanas inmersos en una corrección pero, ¿qué explicación se puede dar al batacazo del lunes?

Para Nitesh Shah, analista de ETF Securities, si el inversor se centra exclusivamente en los fundamentales, la caída del precio del metal amarillo obecedió a una combinación de eventos: la confirmación por parte de Janet Yellen la semana pasada de que la Reserva Federal subirá tipos este año, la supervivencia de Grecia en la zona euro – “el oro cotizaba con prima sobre la eliminación del peor escenario posible”, indica el experto- y los datos publicados por el Banco Popular de China respecto a las reservas de oro acumuladas en 2009, que decepcionaron al mercado.  “Creemos que es improbable que la Fed suba tipos particularmente rápido, que Grecia aún no ha salido del peligro al hablar otra vez el ministro alemán de finanzas el viernes sobre las opciones de Grexit, y que se está subestimando la extensión sobre la que China quiere mantener el estatus de su reserva de divisas y por tanto que diversificará dichas reservas al margen del dólar. El oro es una parada obligada cuando las otras divisas de reserva (euro, yen) se están depreciando”, concluye Shah al respecto. 

Sin embargo, el analista también ve factores técnicos detrás del mini flash crash del oro: “Una caída significativa del precio tiene el potencial de disparar stop losses, forzando a mayores ventas, lo que lleva a mayores caídas, creando esencialmente un círculo vicioso”. Su opinión al respecto es que “los inversores y asesores tácticos que no se centran en los fundamentales y al seguir ciegamente los patrones marcados por los datos refuerzan esa espiral bajista”.  Una observación del posicionamiento de futuros sobre la commodity lleva a Shah a aseverar que nunca los especuladores habían sido menos alcistas. 

El experto observa que un buen número de metales industriales, como el aluminio o el zinc, también están cotizando “por debajo de sus fundamentales”, por lo que asevera que “el sentimiento negativo ha embarrado todas las materias primas”. Al preguntarle si debería interpretarse esta caída como una señal de compra, el experto de ETF Securities afirma que “a pesar de que es difícil cronometrar un cambio en el sentimiento, creemos que el oro y otras commodities están sobre vendidos”. 

Philipppe Ferreira, responsable de análisis de Lyxor AM, coincide en la identificación de algunos de los desencadenantes de la caída: “La importación de oro a China está debilitándose, junto con la mano dura sobre la corrupción y el atractivo del mercado de renta variable clase A”. Sin embargo, añade más motivos a los ya expuestos por Shah: “Las autoridades indias siguen elevando las tarifas sobre el oro para frenar las importaciones, una gran fuente del déficit por cuenta corriente”. Dicho esto, y de acuerdo con datos del FMI, Ferreira afirma que “la exposición a oro de los bancos centrales está en máximos”. “El apetito por lingotes tras la crisis financiera está retrocediendo al haber alcanzado varios bancos centrales su límite de reservas de divisas”. 

El último factor que explica Ferreira atañe a las propias posibilidades que ofrece el metal amarillo: “Creemos que el oro está perdiendo atractivo de inversión al estar el entorno macro saliendo del modo deflacionario post crisis: el crecimiento global se está recuperando gradualmente;  probablemente la Fed suba los tipos en septiembre; y la eurozona y Japón parecen haberse unido al campamento de la reflación”. Por todos estos factores, a modo de conclusión, Ferreira resume que “el precio del oro es vulnerable a la política de normalización de la Fed, a la apreciación del dólar y a la subida de los tipos de los bonos”. 

El oro no es el único que sufre

Pese a lo espectacular de la caída del metal precioso, no fue la única commodity en protagonizar titulares. El mismo día, el petróleo de referencia en EE.UU. perdía los 50 dólares por barril. Norbert Ruecker, responsable de análisis de materias primas de Julius Baer, señala una vez más a la debilidad de China y a la fortaleza del dólar como responsables, aunque también constata que “los hedge funds y otros inversores acumularon posiciones cortas y las incrementaron para aprovechar el momento de venta”. “Con la caída de los precios de las commodities a nuevos mínimos la presión vendedora se mantendrá elevada en el corto plazo”, vaticina Ruecker. No obstante, en lo relativo al precio del crudo, el expert afirma que “la caída de la producción de shale gas en EE.UU. y la fuerte demanda global debería volver a elevar los precios por encima de los 60 dólares por barril”.