Bonos a corto plazo: ¿riesgo u oportunidad?

Nicolas Coulon_noticia
Firma: cedida (OFI AM).

TRIBUNA de Nicolas Coulon, gestor de fondos y analista, OFI AM. Comentario patrocinado por OFI Asset Management.

Con los tipos del mercado monetario en negativo, las inversiones en bonos a corto plazo (0-3 años) se comportan mejor, ya que permiten a los inversores obtener rendimientos positivos. Los inversores que buscan asegurar parte de sus activos en un mercado inquieto tras meses de ganancias, pueden adquirir exposición a los mercados de bonos en el extremo corto de la curva sin tener que resignarse a perder dinero.

Debemos tener en cuenta que el Ester (el tipo interbancario a un día de la eurozona que sustituye al Eonia) se situaba en el -0,58% a finales de septiembre. Un fondo del mercado monetario debe limitarse a inversiones con vencimientos no superiores a más de dos años. Un fondo de bonos a corto plazo, en cambio, puede incluir valores con vencimientos de hasta tres años. Esta diferencia de un año ofrece un excedente de rendimiento y un mayor efecto roll-down y, por tanto, una mayor rentabilidad esperada.

Un inversor que puede comprar un bono incluso antes de que se pueda incluir en un fondo del mercado monetario, se beneficiará entonces de su subida, impulsada por el aumento de la demanda cuando finalmente se incorpore al universo de inversiones del mercado monetario. Esto se debe a que dichos bonos estarán automáticamente disponibles para una base más amplia de compradores potenciales, lo que los hace más atractivos.

Poco riesgo de subidas de los tipos de interés en el futuro próximo.

Mantener bonos que vencen en 3 años es más arriesgado que invertir simplemente en los mercados monetarios, pero este riesgo sólo se materializará si las condiciones de financiación se deterioran (por ejemplo, si los tipos de interés o las primas de riesgo suben), lo que haría bajar automáticamente el precio del bono en cuestión.

Esto parece poco probable que ocurra en la situación actual, ya que los instrumentos de renta fija a tres años están todavía bajo la influencia de la política monetaria del BCE, que actualmente es extremadamente acomodaticia. El BCE ofrece una elevada visibilidad sobre los tipos de interés a corto plazo a tres años. Algunos observadores del mercado estuvieron preocupados por si el actual repunte de la inflación provocado por el fin de la crisis, pudiera impulsar al  BCE a subir los tipos de interés rápidamente, pero no ha sido así.

El banco central cree que la actual tasa de inflación es sólo temporal,  y que, de hecho, aún no ha alcanzado  su objetivo a medio/largo plazo, por lo que no se esperan subidas de tipos de interés hasta 2023.

Una solución astuta para tipos de interés negativos

El fondo OFI Financial Investment - RS Euro Credit Short Term invierte principalmente en valores Investment Grade (es decir, con una calificación superior a BBB-). No obstante, hasta el 10% de la cartera puede reservarse para valores de alto rendimiento, ofreciendo así a los inversores la posibilidad de obtener un rendimiento excedente, limitando al mismo tiempo su riesgo a la luz de las tasas de impago que se observan actualmente en este segmento. El fondo también aporta diversificación en valores no cotizados, que son una fuente importante de rendimiento.

Estos emisores puede que no hayan adquirido la calificación crediticia de las agencias de calificación del mercado, pero no deben ser ignorados. Podemos asignarles calificaciones gracias a la observación que realizan nuestros analistas de crédito internos. Así es como hemos seleccionado a Bureau Veritas*, el especialista en certificación, que tiene nada menos que cuatro bonos denominados en euros por un total de 1.700 millones de euros.

Por otra parte, nuestra gestión flexible del riesgo de tipos de interés mediante instrumentos swaps, permite a los inversores protegerse contra esta variable, eliminando así uno de los factores de riesgo inherentes a este tipo de fondos. Nuestro enfoque flexible en la asignación de activos (un componente high yield), las calificaciones crediticias (se pueden seleccionar emisores incluso si no cuentan con calificación de las grandes agencias) y la gestión del riesgo de tipos de interés (swaps de tipos de interés), significa que los inversores que deseen comprar exposición a los mercados de bonos a corto plazo,  pueden hacerlo en condiciones que optimizan su perfil rentabilidad/riesgo.

El fondo OFI Financial Investment - RS Euro Credit Short Term lleva ahora la etiqueta ISR. Así que por fin ofrece a los inversores la oportunidad de ayudar a financiar emisores responsables que son calificados por nuestros analistas de ISR y que clasificamos en la categoría de líderes (por ejemplo, empresas de servicios públicos como la portuguesa EDP* y la italiana Terna*), mientras que las empresas con peores resultados en materia de ASG se excluyen sistemáticamente de la selección de nuestro universo de inversión. Por su parte, el mercado de bonos verdes ofrece hasta ahora pocas emisiones de bonos con vencimientos inferiores a tres años.