El incierto pero esperanzador futuro de la inversión libre en España

Diego_copia
Cedida

En esto de los hedge funds, para bien y para mal, no se aplica el viejo paradigma de “Spain is different”. Nuestra incipiente industria tiene sus peculiaridades, pero éstas no la salvan de los reembolsos que la han hecho caer en apenas dieciocho meses de tres billones de dólares americanos a poco más de uno.

Según una encuesta de DB, los inversores esperan una ralentización de reembolsos en 2009. Sin embargo, un 80% cree que habrá rentabilidades positivas.

No es justo juzgar a los HF por su evolución en 2008. Ha sido un año de esos que la industria califica de “riesgo de colas” pero que bien podría denominarse “campo de minas” para la inversión alternativa. Incluso en ese entorno ha resultado más eficiente, en términos de rentabilidad y de volatilidad, que la renta variable, fija o materias primas.

Es curioso que muchos hablen de oportunidad histórica para la renta variable, que cayó un 40% en 2008, y salgan corriendo de la inversión alternativa con un argumento parecido. Con una memoria tan corta lo habitual es comprar caro y vender barato.

Teniendo en cuenta las perspectivas de los activos bajo gestión a corto plazo, prefiero juzgar la evolución de la industria a largo plazo con tres preguntas:

¿Qué es un Hedge Fund? En 2008 aumenta el inversor interesado por estos vehículos cuya estrategia de inversión va más allá de comprar y mantener acciones y bonos, cuya rentabilidad se mide en términos absolutos y no en relativos a un índice de referencia. ¿Qué esperan los inversores de los HF? Retorno absoluto y descorrelación con el resto de sus inversiones. ¿Cumplirán con sus expectativas? En general, la mayoría de los mejores gestores crean sus propias compañías de gestión a través de HF, y razonablemente serán capaces de satisfacer a los inversores en el largo plazo.

En conclusión, los supervivientes saldrán reforzados. Respecto a la oferta, en España se empieza a ver quiénes son los supervivientes que han venido para quedarse. Para la demanda la situación mejorará en la medida en que los proveedores seamos capaces de demostrar que hay valor en este tipo de gestión.