Aún no nos hemos recuperado de los nueve meses que dura una liga cuando la Eurocopa 2012 amenaza con alargar un mes más el parto. Te guste o no te guste el fútbol, durante tres semanas desayunarás con el último baile de la novia de Piqué, con el nuevo peinado de Torres o con la fecha de la boda de Casillas.
¿Quién no ha jugado a ser seleccionador de la “roja” para enmendarle la plana a Del Bosque? Que si Ramos por Piqué, que si Torres por Llorente… Aunque no es tan divertido, también podemos jugar a entrenador-ahorrador de fondos de inversión para componer una cartera que cubra todas las posiciones del campo. Este es mi equipo ideal:
Para la portería buscaré la máxima seguridad: fondos de deuda pública a medio plazo de países de la OCDE con rating mínimo AA. Si no son en euros cubriré siempre el riesgo divisa. El objetivo de mis fondos-guardameta es preservar mi dinero y protegerlo ante catástrofes.
En la defensa pondré fondos de deuda financiera y corporativa a corto plazo denominados en euros. Mis “piqués” y “sergioramos” son fondos rocosos que invierten en bonos o depósitos de elevada liquidez de empresas y bancos de primera línea. El objetivo de esta zaga es simple: “preservación de capital”, aceptando riesgo de crédito controlado, evitando el riesgo de concentración y limitando en lo posible el riesgo de iliquidez.
En el centro del campo quiero imaginación, buen regate, flexibilidad y equilibrio. Mis “xavis” e “iniestas” son fondos mixtos de rentabilidad absoluta donde el gestor aporta valor con sus decisiones estratégicas de exposición a distintos tipos de riesgo. Valoraré positivamente la creatividad del gestor siempre que no me exponga a aventuras temerarias. El componente de riesgo tiene que ser fácil de entender, fácil de valorar y fácil de deshacerse de él (si fuese necesario). El objetivo de mi centro del campo financiero es aprovechar la capacidad de los gestores para aportar valor con su conocimiento y experiencia: quiero colorido en los momentos dulces y sobriedad en las situaciones de incertidumbre.
Mi delantera estaría formada por fondos de renta variable indexados y baratos. No quiero que mis “torres” y “llorentes” tomen decisiones tácticas, tan solo quiero que rematen a gol. Y la forma más limpia de hacerlo es invirtiendo directamente en bolsa americana, europea, japonesa y emergente indexada a las principales referencias del mercado (S&P 500, EuroStoxx, Nikkei, MSCI Emerging Markets). El objetivo de mi delantera es generar valor estratégico a largo plazo diversificando internacionalmente.
El peso de mis fondos-guardameta y “sergioramos” es del 50%. Los “iniestas” un 30% y los “torres” un 20%.
Es probable que con esta selección no gane la Eurocopa. Ganar un campeonato de Europa es muy complicado: sólo lo hace un equipo de 16. Pero he elaborado un equipo profesional, robusto y equilibrado en todas sus líneas. Estoy seguro que me ayudará a lograr mis objetivos como entrenador-ahorrador: “Preservar mi capital y hacerlo crecer de forma ordenada en el tiempo”.