MIFID II, protección del inversor en evolución

David Espejo
Expert Witness Forensic & Compliance

Despacio, casi sin darnos cuenta, han pasado ya más de siete meses desde que la normativa MIFID II, aún sin trasponer a norma española, entró en vigor y es plenamente aplicable.

Haciendo memoria, hace casi ya una década -se dice pronto- que la MIFID primigenia entró en vigor, y es preciso recordar que su implementación efectiva por, la toma de conciencia por parte de los directivos, el cambio en la cultura en el ámbito del asesoramiento financiero y especialmente en el negocio de banca privada han requerido el trascurso de una parte  significativa de estos casi ya diez años.

MIFID II es una evolución de MIFID y sus conceptos, que esencialmente establece más obligaciones a los asesores.

Aún con temas concretos sin clarificar y desarrollar, bien por su complejidad, bien por las inversiones y costes que requieren (la ampliación de supuestos en los que son necesarias las grabaciones telefónicas de conversaciones) no es fácilmente viable una implementación al 100% e inmediata.

Nuestro regulador, la CNMV está mostrando hasta ahora sabia prudencia. Las actuaciones horizontales hasta la fecha dan claras señales en temas como registro y distribución de IIC no registradas o sin DFI, productos complejos y PRIIPs. Parecen advertencias y mensajes sobre la interpretación del supervisor de dichos aspectos.

Las entidades deben estar preparadas, analizar su situación y finalizar las tareas pendientes, por ejemplo la definición del público objetivo y la coherencia del mismo entre productor y distribuidor. En aplicación de su Plan de Actuación 2018, en el próximo trimestre son esperables Inspecciones y revisiones de la CNMV.