Posicionamiento, perseverancia y paciencia (las tres Ps)

Inigo_Bilbao_Goyoaga_05_2016
Iñigo Bilbao

Invertir es un arte. No es fácil. La persona que invierte para la jubilación debe invertir casi el 100% en renta variable sobre todo cuando es joven. Posteriormente debe ir reduciendo la parte de renta variable para ir amoldándose a su edad hasta casi llegar a eliminarla cuando ya está jubilado. Lo ideal para invertir ahorros permanentes es comprar un producto barato que invierta en renta variable de países desarrollados y cumplir las tres Ps: Posicionamiento, Perseverancia y Paciencia y estar invertido 10 años o más.

Cuando digo producto barato me refiero a ETF o fondo índice. Por supuesto que un producto bien gestionado puede merecer también la pena, pero la experiencia nos dice que la gestión pasiva supera a la activa en el 80% de los casos al invertir a 10 años vista, lo que hace de la elección del gestor activo adecuado una difícil tarea.

¿Pero qué ocurre cuando tengo unos ahorros que son para utilizarlos para múltiples usos como la compra de un coche, los estudios de los hijos o para comprar una vivienda, y no voy a estar invertido más que 3 o 4 años?. En esos casos, que son muy frecuentes, la gestión flexible ofrece muchas posibilidades. Una vez se tiene claro el grado de tolerancia al riesgo que se es capaz de asumir se debe elegir una gestora y un producto o vehículo.

Productos con una posición de renta variable entre 20% y 40% suelen ser los más elegidos por los inversores europeos. Luego hay que elegir la gestora adecuada. A veces un perfilado de los que ofrecen los bancos españoles y gestoras locales puede ser una buena solución, ya que en el caso de los fondos de fondos, pueden combinar gestión pasiva barata para construir el corazón de la cartera y combinarla con gestión activa, y de hecho las entradas de dinero que hemos visto en estos productos en España los últimos 5 años lo ratifican. Asimismo, otra posibilidad es elegir un experto en gestión flexible, normalmente una boutique especializada, y que ellos hagan la gestión durante ese periodo que voy a estar invertido, de tal forma que si necesito el dinero, aunque no sea el mejor momento para retirarlo, la pérdida o la no ganancia que pudiéramos acumular sería asumible.

Seleccionar un fondo flexible o perfilado adecuado lleva un cierto tiempo y se debe acudir a un asesor, incluso un asesor automatizado, pero una vez hecha la inversión el verdadero experto debes ser tú mismo.

He comenzado este artículo indicando que invertir es un arte, y como todo arte tiene ciertas reglas. La primera es la diversificación, la cual ya la has elegido al seleccionar el producto. Posteriormente son necesarias las tres Ps o las reglas de oro de la buena inversión: Posicionamiento, Perseverancia y Paciencia. En una gestora de gestión flexible en la que trabajé me enseñaron que las tres Ps siempre te llevan a buen puerto, y que en momentos de zozobra o turbulencia de los mercados es muy importante recordarlas y aplicarlas.