Asís Maestre presenta los motivos que favorecen actualmente la inversión en este segmento de mercado, que presume de unas rentabilidades interesantes de cara a la última mitad del año. Comentario patrocinado por Bellevue.
TRIBUNA de Asís Maestre, ventas Institucional de Bellevue. Comentario patrocinado por Bellevue.
Si hay que destacar una razón por la que incorporar esta clase de activo en cartera, es sin duda, las atractivas valoraciones que nos encontramos. Estamos ante una de esas oportunidades que se dan cada 10-15 años:
Si nos fijamos en las valoraciones, vemos que las pequeñas están más baratas que las grandes, cosa poco habitual. Pero además cotizan dos desviaciones típicas por debajo respecto a su media histórica. Solo vimos una situación parecida en el 2008 y ¿qué pasó después? Vivimos uno de los periodos más largos, hasta el 2021 de comportamiento relativo de las pequeñas mejor que las grandes. Lo vemos en el siguiente gráfico:
Obviamente han sido años complicados. Sufrimos una pandemia en el 2020, después la guerra de Ucrania que termino con la subida de tipos por parte de los bancos centrales. Todo esto, como no podía ser de otra forma, pasó factura a esta clase de activo. Pero, como comentaba antes, nos atrevemos a decir que ya estamos al final de este periodo y que ya se empiezan a ver entradas de dinero en pequeñas compañías europeas. Pero es que además, gozan de una salud financiera mejor que las grandes:
Como vemos, las pequeñas tienen menos deuda que las grandes. Es cierto que las compañías norteamericanas siempre han cotizado con una prima respecto a las europeas. La media de esa prima se sitúa en un 20%, pero ahora mismo esa prima se sitúa en el 60%.
Esto último nos lleva a que prefiramos las pequeñas europeas respecto a las americanas. El repunte de inflación que hemos vivido estos últimos años llevo a los bancos centrales a subir los tipos de interés de una manera muy brusca en un periodo muy corto de tiempo. Esto obviamente penalizó el comportamiento en bolsa de las pequeñas compañías, pero también paralizo por completo la compra de compañías. Podemos decir que las pequeñas están tan baratas que es cuestión de poco tiempo que este tipo de operaciones repunte con fuerza. Eso obviamente va a suponer un impulso para esta clase de activo, normalizando valoraciones.
Pero es que además, en Europa ya han empezado con las bajadas de tipos. Esto sin duda, es muy positivo para esta clase de activo. No deberíamos esperar a que haya una bajada brusca de los tipos de interés por parte del banco central para entrar en estas compañías. De hecho, preferimos que sea una bajada paulatina y que la selección de compañías aporte valor. Si es brusca en un periodo corto de tiempo, eso empujará el mercado hacia arriba sin distinguir entre buenas compañías de las malas compañías. Es interesante ver en este punto la diversificación en cuanto estilos de inversión que tenemos:
Somos una casa de análisis completamente fundamental, bottom up, sin restricción de Benchmark, pero eso no significa que no encontremos valor tanto en value como growth y que puedas tener una cartera diversificada que genere Alpha en el largo plazo. De hecho, tenemos histórico desde 2011 y batimos constantemente al índice:
De hecho, desde el 2011 y eso que hemos pasado por momentos complicados, estamos en el primer cuartil a todos los periodos:
Como señalaba al principio, desde 2020 hemos pasado por momentos muy complicados: una pandemia, una guerra en Europa y posterior subida de tipos. Aun así, el comportamiento está siendo excelente:
Por todo lo comentado, vemos una gran oportunidad en esta clase de activo, que puede darnos grandes alegrías si le damos plazo y queremos que una alternativa sea nuestro Bellevue Entrepreneur Europe Small Caps (LU0631859062).